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Rincón Beisbolero

Por Claudio Martínez Silva

Después de tres temporadas llenas de problemas, hoy Federico Castañeda Sonora es un pelotero muy motivado que sólo piensa en ganar uno de los lugares como abridor en la rotación de Vaqueros Laguna. Nacido en Torreón, Coahuila el 26 de febrero de 1984, ?Lico? recibió la oportunidad de jugar en Liga Mexicana durante la temporada 2003, bajo la dirección de Alex Taveras.

Fue un juego nocturno en el Estadio de la Revolución, los Olmecas de Tabasco eran el rival en turno y a Martín Gómez correspondía iniciar, sólo que el de Minatitlán tuvo problemas con una ampolla y así se abría la oportunidad para Federico Castañeda, a quien por cierto, se le avisó apenas unos minutos antes del partido, que él sería el abridor.

Era en aquel entonces un joven de 19 años, con experiencia en la Liga Mayor de La Laguna y las sucursales de Vaqueros. Nunca se entendió por qué Taveras no incluyó a Federico en la rotación de abridores, sobre todo cuando el staff era un verdadero desastre, con el dominicano Efraín Valdez y el también veterano y zurdo Isaac Jiménez, quienes muy pronto dejaron su sitio en la rotación. Ahí estaban los quisqueyanos Antonio Isabel Girón y José Aníbal Reynoso, junto a algunos más que muy poco aportaron a la causa, como Édgar Pérez, Abraham Elvira, Juan José Martínez y Rodolfo González, ya estelar con los Diablos Rojos del México.

Para 2004 Federico Castañeda volvió a aparecer en el roster de 28 peloteros; el joven torreonense llevaba una pesada carga de trabajo y los problemas en el brazo de lanzar empezaron a manifestarse; Federico, en su afán de ganar un sitio en Liga Mexicana, nunca se negó a lanzar cuando era requerido, pero entonces las lesiones día con día se hicieron mayores, hasta obligarlo a alejarse de la actividad, ya en la etapa final de la temporada 2005, cuando jugó a préstamo con los Rieleros de Aguascalientes.

Como elemento joven y lleno de ese ímpetu natural de quienes lo son, Federico tal vez cometió algunos errores, como aquel juego con los Mineros de la Sección 74 en el que hizo 167 lanzamientos sobre una loma dispareja y que da muchos problemas. A las dificultades físicas se unió la inconformidad de la directiva de Vaqueros y fue así que, limitado en sus facultades, Federico se fue a Aguascalientes, en donde no pudo terminar el calendario regular debido a la lesión.

Hoy ?Lico? platica entusiasmado sobre su rehabilitación, pero sobre todo de su deseo por ser uno de los inicialistas en el staff de Fernando Elizondo. El camino ha sido largo y difícil, su actividad fue muy escasa, incluso en la Liga Mayor de La Laguna. El camino de la rehabilitación representa muchos sacrificios, pero todo vale la pena al saber que hoy está al 85 por ciento de su capacidad, la cual será total a la hora de iniciar la temporada 2006.

Antes de su debut en la Liga Mexicana de Verano, los entonces Algodoneros de Unión Laguna recibieron de los Diablos Rojos del México, a través de Javier Cavazos, una buena oferta por Federico Castañeda; Ray Padilla, gerente deportivo de la novena lagunera dijo no a Roberto Castellón, director deportivo de los escarlatas, que tenía bien checado a Federico Castañeda, el cual ya destacaba en la sucursal de los Algodoneros.

Hoy en día al observar el trabajo de Eleno Cuen con los lanzadores que ya se encuentran en el campo de entrenamiento, se espera que el sonorense, hoy encargado del pitcheo en Vaqueros Laguna, sepa llevar por el buen camino a Federico Castañeda, deseoso de ser uno de los inicialistas y de por fin, tener una temporada exitosa en Liga Mexicana, justo con el equipo de su tierra, en donde está su familia y sus amistades más cercanas.

Federico recuerda con amargura las muchas ocasiones que subió a la loma de pitcheo con problemas y dolores en su brazo; hoy las condiciones son diferentes y a pesar de que apenas cumplió 22 años de edad el pasado 26 de febrero, la experiencia adquirida ha sido valiosa, sobre todo porque le enseñó el camino correcto para buscar un sitio como estelar de la Liga Mexicana y sobre todo, de Vaqueros Laguna.

Hoy se habla de apertura en el campamento de Vaqueros, se dice que todo elemento que ahí trabaja tendrá su oportunidad, Castañeda Sonora es un hombre motivado y con deseos de ser tomado en cuenta como uno de los abridores. La experiencia de los tres años anteriores ha sido dolorosa, pero muy valiosa y él sabe que debe aprovechar el momento. Ayer Federico hizo 24 lanzamientos, la semana entrante lanzará desde el bullpen y a partir de entonces el trabajo encaminado a alcanzar el 100 por ciento cuando arranque la próxima temporada.

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