Ya se había dicho que no es lo mismo enfrentar a los Tuneros de San Luis y los Rieleros de Aguascalientes, que a los Sultanes de Monterrey y Saraperos de Saltillo. La última serie en el Estadio de la Revolución dejó grandes alegrías a los aficionados, ese público que merece un aplauso y que reconoce en sus Vaqueros Laguna a un equipo que nunca deja de luchar.
Ayer la historia volvió a repetirse, ya no vale la pena hablar de lo que falló, cuando la realidad dice que se han perdido cinco enfrentamientos en forma consecutiva, como sucedió en el arranque de la temporada, frente a los Acereros de Monclova y los Sultanes de Monterrey.
También se había dicho en los primeros partidos de 2006, que esperar mucho a los extranjeros que no rinden, es correr un gran riesgo. Se ha jugado ya más de un mes del calendario regular y no existe argumento válido que explique la permanencia de Melvin Nieves en la novena naranja. El de Puerto Rico tuvo una gran actuación en 2005, pero en la nueva temporada ha sido uno muy diferente, lejos de ese cañonero que estuvo en el mejor beisbol del mundo.
No se conoce la decisión que pueda tomar la directiva en cuanto al caso concreto de Melvin Nieves, pero sí es desesperante ver como el boricua recibe ponche tras ponche, mientras que en los senderos hay corredores en espera del batazo oportuno; Vaqueros Laguna ha perdido muchos partidos por la mínima diferencia y si de alguien se esperaba ese aporte, es precisamente de Melvin Nieves y de Eddy Díaz.
Se habla de la gran cantidad de corredores en base que deja la novena de Vaqueros Laguna en cada partido, de la falla de los lanzadores inicialistas, de los relevos que no responden, del mal corrido de bases y de la maldición de las lesiones, que en este 2006 apareció muy pronto.
A más de un mes del arranque de la temporada, se ha determinado no reforzar el pitcheo y sin lugar a dudas, la decisión puede ser determinante; el problema ofensivo no es de gran cuidado porque el equipo ha bateado, si a la hora buena no viene la línea que se necesita, ésta pronto llegará, pero resolver las carencias del pitcheo requiere de algo más que esperar.
Vaqueros Laguna llegó al inicio de la serie en Monterrey como cuarto lugar de la Zona Norte, hoy es sexto y los Reieleros de Aguascalientes difícilmente le darán alcance, pero Monclova sí está en posibilidades de colarse y de no haber una notable mejoría en la escuadra naranja, la sorpresa podría ser muy desagradable y llevar al equipo de Fernando Elizondo hasta la quinta posición del grupo norteño en la primera vuelta.
Quien sea el encargado de tomar decisiones, Carlos Gómez del Campo o bien, el Consejo Deportivo, tiene que hacerlo ya, porque es importante aprovechar la unión que existe en el grupo y la forma en que el equipo pelea, ya que cuando las derrotas se repiten uno y otro día, todo ese ánimo tiende a desaparecer.
La directiva ha tomado decisiones muy acertadas que saltan a la vista, pero la falta de refuerzos comprometidos con la organización, hoy tiene al equipo en una situación complicada, que, sin embargo, le da para alcanzar el cuarto lugar del Norte, por encima de Tuneros de San Luis y Potros de Tijuana. El requisito es actuar ya, porque cuánto más se va a esperar a Melvin Nieves, un bateador que ha demostrado sobradamente sus condiciones, pero que en 2006 llegó muy fuera de forma por la inactividad que tuvo en el invierno.
Seguramente existe gran preocupación entre la directiva y el cuerpo técnico por enderezar el camino y también se puede afirmar que existen varios nombres en la lista de posibles refuerzos, pero ya se antoja necesario actuar y que esas caras nuevas hagan su presentación el próximo martes, al recibir a los Saraperos de Saltillo.
No es criticable haber contratado a Melvin Nieves, el de Puerto Rico es un gran bateador, pero sobre todo, un hombre sano, que viene a La Laguna con su familia y de quien no existe queja alguna en cuanto a su conducta fuera del terreno de juego. El problema de Melvin es que no ha pesado en el orden al bat como debería, para dejar todo el peso de la ofensiva en Eddy Díaz, Rafael Castañeda, Julio Reyes, José Amador Rodríguez y Fernando ?He-Man? Rodríguez.
Esa anhelada cuarta posición definitivamente está al alcance, pero es necesario que el equipo mantenga su mística de lucha, que los hombres importantes de la ofensiva conecten a la hora buena y que el pitcheo, con los ajustes que deben hacerse de inmediato, responda y se mantenga en un alto nivel, ante la calidad ofensiva de los equipos que se tendrán enfrente.
Hoy, de cara a la lucha por ocupar la cuarta posición ya no habrá juegos ante los Tuneros de San Luis ni los Rieleros de Aguascalientes, equipos a los que Vaqueros Laguna dominó en sus enfrentamientos. Tampoco los Sultanes de Monterrey están más en el futuro inmediato, pero sí los Saraperos de Saltillo, Pericos de Puebla, Potros de Tijuana y Acereros del Norte, contra quienes se va a pelear por la mejor posición al final de la primera vuelta.