Con su gol de ayer ya es el máximo goleador de la historia mundialista.
Ronaldo marcó el decimoquinto y superó en uno al alemán Gerd Müller, un cazagoles de los setenta, campeón del Mundo en 1974, y que futbolísticamente era conocido como el "Bombardero"
DORTMUND,ALEMANIA
EFE
Sólo necesitó cinco minutos para sumar su gol número 15. Recibió un pase desde la circunferencia de Kaká, con una 'bicicleta' engañó al portero ghanés Richard Kingson y remató a puerta vacía a pesar del desesperado intento del defensa John Pantsil de evitarlo.
El delantero del Real Madrid llegó al Mundial con doce tantos, los mismos que había conseguido en su carrera mundialista Pelé, el gran mito del futbol brasileño. A pesar de las continuas críticas recibidas por el exceso de peso al inicio de la pretemporada antes de Alemania, Ronaldo hay ido mejorando poco a poco.
Marcó dos tantos frente a Japón y hoy el tercero en cuatro partidos. Con 29 años y en su cuarto Mundial, Ronaldo ha vuelto a renacer. 'El fenómeno', aquel delantero que no jugó ni un minuto en el Mundial conquistado por Brasil en 1994, pese a formar parte de la plantilla, y fue el máximo goleador en el último, disputado en 2002, ha vuelto.
Golea Brasil
Un gol de Ronaldo, que le consagró como cañonero máximo de todos los mundiales, otro de Adriano que eleva a 200 la cuenta de Brasil en la historia de este torneo y uno de Zé Roberto empujaron a los brasileños a los cuartos de final con una goleada por 3-0 sobre Ghana.
Carlos Alberto Parreira esperaba un mano a mano de mucho riesgo y preparó a su defensa para resistir el asedio de "francotiradores", dos escenarios que sus pupilos capearon con gran aplicación táctica, aunque una vez más la pirotecnia técnica se redujo a algunos minutos.
Tiempo suficiente para reforzar el entusiasmo de una hinchada y meter miedo a los próximos adversarios pues una vez más Brasil demostró que el esperado "jogo bonito" es apenas un ingrediente más en el futbol y que el ABC del resultado es un compendio que ellos saben de memoria.
Brasil tuvo un comienzo deslumbrante y arrollador, como también los fueron sus remates en el primero y el segundo tiempo.
A los cinco minutos, Kaká soltó un pase en profundidad desde la circunferencia central a Ronaldo, que solitario avanzó treinta metros rumbo a la portería.
Con regate corto eludió a Richard Kigson y antes de recibir la marca de Pantsil, que ya le respiraba en la nuca, puso el balón en el fondo para decretar el 1-0 y asumir el trono de cañonero general en la historia de los mundiales, con quince goles, uno más que el alemán Gerd Müller.
Brasil llegó al WM Stadion Dortmund con una consigna clara: explotar con lanzamientos profundos desde la mitad la espalda de una defensa que avanza en bloque para asfixiar al rival a partir de la mitad de la cancha.
Ronaldinho Gaúcho, Kaká, Zé Roberto y después Ricardinho, se aplicaron a la regla y con lanzamientos cruzados desarbolaron una defensa a la que no le salió el manido recurso del paso adelante para dejar a sus rivales en fuera de juego.
Pudo servir si el árbitro eslovaco Lubos Michel hubiera advertido la posición ilegal de Adriano al recibir el balón para marcar la puntilla, cuando transcurría el primer minuto de compensación de la primera etapa.
Pero no ocurrió así y los brasileños, que ahora tienen 200 goles en la historia de los mundiales, se fueron al descanso con la tranquilidad de un 2-0 que ratifica la importancia de tener hombres desequilibrantes cuando sucesivos cortocircuitos afectan el juego colectivo.
Cafú, que hoy llegó a 19 partidos y se consagró como el más rodado de los brasileños en los Mundiales, también intentó el suyo en un partido que terminó con fiesta, sin mucha pirotécnica, pero con contundencia.