La Habana, (EFE).- Los cubanos se aprestan a celebrar el "Día de los Enamorados", como identifican al universal festejo de San Valentín, sin resistirse al consumismo y dispuestos a mantener una costumbre heredada del pasado capitalista.
Volcados en la búsqueda del regalo que entregarán a su media naranja, muchos cubanos acuden por estos días a las tiendas en divisas en busca de un presente con el que halagar a su pareja.
En la red de comercios en pesos convertibles (CUC) cuelgan adornos de corazones rojos con mensajes para los "enamorados" y carteles con versos del poeta y padre de la patria José Martí, quien definió el amor como "delicadeza, esperanza, merecimiento y respeto".
Frases de Martí también rezan en las 600 mil postales con sello prepagado y para entrega a domicilio comercializadas en las oficinas de correos.
Pese a los tímidos reclamos comerciales a los posibles consumidores y a la poca oferta de rebajas de precios para la ocasión, los productos de perfumería son los más demandados entre los cubanos en estas fechas, explicó una dependienta de una tienda del barrio habanero de Miramar.
Desde un perfume, a una prenda de vestir pasando por una caja de bombones y hasta un electrodoméstico pueden figurar entre los artículos a elegir para el obsequio, en dependencia de las posibilidades económicas de cada cual.
También hay alternativas mucho más económicas, como el socorrido ramo de flores, que puede costar desde un dólar hasta treinta.
