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México, DF.- México avanza en el combate a la pobreza, pero el modelo de transferencias está agotado y debe erradicar esa problemática con crecimiento económico, empleos y competitividad, opinó la directora de la Oficina del Banco Mundial (BM) en México, Isabel Guerrero.
Señaló que el programa Oportunidades del Gobierno Federal es un instrumento que sirve de ejemplo en el ámbito internacional y contribuye a que la pobreza disminuya. Sin embargo, dijo que las transferencias de recursos federales y las remesas que reciben familias mexicanas de sus parientes que trabajan en Estados Unidos tienen un límite.
En el foro ?Agenda para Promover la Competitividad del País? aseguró que los índices de marginación disminuyeron en los últimos cinco años, principalmente en las zonas rurales, aunque el fenómeno persiste en las áreas urbanas donde existen pobres que necesitan trabajar.
La pobreza urbana requiere empleos de calidad, no en el sector informal, sino en inversión formal y para ello lo más importante es la competitividad, añadió.
Advirtió en ese sentido, que México se ubica en la actualidad entre los diez principales países en el ámbito mundial, pero ?eso no va durar mucho sino sigue creciendo?.
El reto del país, dijo, está en la capacidad para competir porque México ?camina? mientras otras naciones asiáticas y de América Latina ?corren? y trabajan por aumentar la competitividad, por lo cual la brecha cada vez se agranda más.
Mencionó que de 2001 a 2005 México creció a una tasa de 1.6 por ciento en promedio; China más de ocho por ciento y Chile 3.6 por ciento, lo que refleja la necesidad de que el país acelere los pasos para crear empleos y aumentar el vigor de la economía.
La directora del BM opinó que los impuestos, regulación, altos precios de electricidad y el clima de negocios son factores que afectan el nivel de competencia de las compañías mexicanas frente a otras internacionales.
