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ROMA, ITALIA.- Hoy jueves se cumplirá el primer aniversario de la última aparición pública de Juan Pablo II, quien ya no pudo pronunciar palabra al bendecir desde la ventana de su apartamento en el Palacio Apostólico a los fieles.
En los dos meses precedentes el Papa polaco, de 84 años de edad y enfermo del mal de Parkinson, había sido hospitalizado de urgencia en dos ocasiones y le había sido practicada una traqueotomía. También había debido renunciar, por primera vez en sus 26 años de pontificado, a encabezar los ritos de la Semana Santa apenas concluidos.
Sus condiciones de salud se agravaron y tras su imposibilidad de hablar a la multitud, documentada por las cámaras de televisión de todo el mundo, ayer miércoles 30 de marzo de 2005, se le instaló una sonda nasogástrica, pues ya no podía nutrirse autónomamente.
El Pontífice se había negado a retornar al hospital Gemelli y, según reveló recientemente su secretario personal, Stanislaw Dziwisz (en el libro “Dejadme ir”) , tras su fallido discurso para la audiencia del miércoles, dijo: “quizá es mejor que muera”.
“La profunda unión con Dios de Juan Pablo II y su participación en el mysterium pascual se develaron en toda su plenitud los últimos días de su vida”, dijo Dziwisz.
“El cuerpo se debilitaba cada vez más, hasta la total expoliación y la obediencia ‘hasta la muerte’, pero permanecía fuerte de espíritu y amando hasta el final”, añadió. Al día siguiente, el 31 de marzo del año pasado, el Papa sufrió una infección en las vías urinarias, con fiebre alta, seguida de un shock séptico y un colapso cardiocirculatorio.
Poco después de las 22:00 horas locales del dos de abril el sustituto de la Secretaría de Estado, Leonardo Sandri, anunció a los miles de presentes reunidos en silencio en la plaza de San Pedro que Juan Pablo II había fallecido a las 21:37 horas.
Asila italia a afgano converso
El hombre que fue enjuiciado y casi condenado a muerte en Afganistán por haberse convertido del Islam al cristianismo llegó el miércoles a Italia, donde recibió asilo.
El primer ministro Silvio Berlusconi dijo que Abdul Rahman ya había arribado y estaba al cuidado del ministerio del Interior. “Ya está en Italia”, dijo. “Creo que arribó anoche”.
El encarcelamiento de Rahman en Afganistán dio lugar a un pedido del papa Benedicto XVI al presidente afgano Hamid Karzai y a esfuerzos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para hallar un país dispuesto a darle asilo. El canciller Gianfranco Fini, se expidió sobre el caso desde el comienzo, afirmando que Italia debía expresar su “indignación”. La conversión es un crimen bajo la Ley islámica afgana.
“Últimos días no fueron tan trágicos”
Los últimos días del Papa Juan Pablo II no fueron tan trágicos como aseguran los medios de comunicación, aseguró ayer el cardenal Stanislaw Dziwisz, metropolitano de Cracovia.
Dziwisz, que fue secretario particular del Papa polaco y le acompañó en los últimos días de su vida, añadió que Juan Pablo II era consciente de que se acercaba su hora y estaba plenamente preparado para la muerte.
“Era totalmente consciente, oía los rezos de la multitud congregada bajo sus ventanas y con su calma y tranquilidad ayudaba a quienes le rodeaban a mantener o recuperar la paz espiritual”, declaró Stanislaw Dziwisz.