El Universal-AEE
MÉXICO, DF.- Serán diez y no 12 los concursantes que formen parte del reality más ambicioso de Sony Entertainment Television Latinamerican Idol que está cobrando forma mientras la fecha se acerca.
En entrevista telefónica, Sergio Pizzolante, V.P. y co-gerente general de SPE Networks Latin America, comenta que ya se encuentran en la etapa de preproducción, ?esta semana abrimos la convocatoria para los mercados principales, y está bastante fuerte la aceptación. En los primeros cuatro días de la página web se descargaron 20 mil aplicaciones?.
Afirma que se pretende llegar a cuatro mil participantes por mercado, México, Colombia, Venezuela y Argentina, pero dice, no se limitará a esos países, ?ésas serán las plataformas para que acudan a los castings, ya se han recibido de Nicaragua, Chile, Perú y un brasileño que seguro se colará por ahí?.
Con respecto al jurado y al anfitrión, dice se está negociando los detalles finales, pero asegura será gente muy respetada en el mundo de la música y en algunos casos muy conocidos, ?aunque esta no es la premisa para el programa, aquí los protagonistas son los participantes, no los jueces?.
?Buscamos personas reconocidas en el mundo de la música y cuya trayectoria musical de alguna manera garantice que será una buena guía tanto para los participantes durante el desarrollo del programa, como para detectar el talento y carisma que es lo que buscamos en el ídolo latinoamericano, así como para guiar a la audiencia a la hora de votar.
?Más allá de que tan conocidos son antes de salir al aire, lo importante es que tan reconocidos son dentro del mundo de la música y a través del programa se dan a conocer. Usando el ejemplo del programa estadounidense nadie sabía quien era Randy Jackson o Simon antes de salir al aire y ambos tenían un trabajo musical respetable?.
La idea, asegura, es que a diferencia de los concursantes, se requiere de un panel de jueces y un anfitrión que represente de una manera multinacional a Latinoamérica.
La mecánica será la misma comenta. ?Serán cuatro etapas, la primera de casting y precasting en donde se sacarán entre tres mil y cuatro mil personas por país. Después se presentarán ante los jueces sólo mil y serán 100 los finalistas que lleguen a Buenos Aires, lugar en donde será grabado el programa?.
Con esas cifras se tiene pensado tener a 25 personas por mercado, pero depende del talento, no de la nacionalidad. ?El plan de producción es buscar una representatividad de América Latina, se buscará al mejor, si resulta que de los diez hay cinco mexicanos, así será. No es una competencia regional o de países es Latinoamérica unida buscando un ídolo?.
El ganador se llevará un contrato con la disquera Sony-BMG para la grabación de su primer disco, así como un contrato de manejo de talento y tiempo en cámara con el canal, quien lo acompañará en su recorrido.
Pizzolante no deja fuera la idea de tener invitados como la versión original, pues dice que la gente que antes se negaba a presentarse en el programa, ya viendo la magnitud de este proyecto, ha comenzado a buscarlos para formar parte.
Por su parte Flavia da Matta, productora ejecutiva, dice que la diferencia entre Latinamerican Idol y American Idol radica en que el estadounidense se hacía en diferentes estados y el latino será en diferentes países.
