Secuestran a 21 personas en distitntas partes de la nación árabe.
EFE
Bagdad, irak.- Veintiún personas han sido secuestradas en las últimas horas en cinco lugares diferentes de Irak, informaron fuentes de la Policía.
Según las fuentes, un grupo de hombres armados que vestía uniformes de la Guardia Nacional y que asaltaron una oficina de cambio en el barrio de Haritiya, en el oeste de Bagdad, se llevaron a seis empleados como rehenes. Los atracadores robaron además 50 mil dólares estadounidenses y 15 millones de dinares iraquíes, según las Fuerzas de Seguridad.
En un segundo incidente, otro grupo de pistoleros, esta vez disfrazados con uniformes de las Fuerzas Especiales del ministerio del Interior, penetraron en una oficina de la compañía coreana Daewoo en el centro de Bagdad y secuestraron al director, Ihsan Al Yumaili y a dos ingenieros que trabajan en la empresa.
Otros tres empleados de la misma compañía, en este caso de la Calle Palestina, fueron secuestrados por hombres armados que también llevaban uniformes de la Policía, y los condujeron a destino desconocido.
Asimismo, fuentes del ministerio de Enseñanza Superior e Investigación, aseguraron que el rector de la Universidad de al Anbar, Abdel Hadi Rayab Al Haiti, fue raptado por desconocidos, delante de su casa, sin ofrecer más detalles sobre el suceso.
La organización de ulemas musulmanes, la máxima autoridad suní en el país solicitó, por su parte, la liberación inmediata de Rayab Al Haiti.
Por último, el hijo de un jeque tribal y alcalde de un Ayuntamiento de la periferia del noreste de Bagdad, fue secuestrado también ayer por desconocidos, según informó ayer la Policía. El plagiado se llama Nawar, hijo de Abdel Razaq al Thamer, quien lidera la tribu Albu Hishma, del noreste de Irak, y que llegó a ser parlamentario en el Consejo Nacional en la era de Saddam Hussein.
Los secuestros se han convertido en moneda corriente en el Irak post Saddam, y muchas veces responden a motivos de mera extorsión económica, aunque otras veces tienen objetivos políticos, y en estos casos son protagonizados tanto por grupos suníes como shiies.