GUADALUPE VICTORIA, DGO.- La tala de la reserva forestal de los ejidos Felipe Carrillo Puerto y Antonio Amaro no ha cesado; sin embargo, la diferencia está en que ahora se hace con el consentimiento de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Lo anterior fue dado a conocer por Rubén Ibarra Alcántar, presidente de la Junta Municipal de Felipe Carrillo Puerto, quien desde principios de año ha señalado las irregularidades que supuestamente ha cometido Sergio Márquez Hipólito en complicidad con el alcalde, Mario Alberto Ramírez Corral.
Después de varias denuncias por la tala ilegal de árboles, Paulino Córdova Quiñones declaró que sancionarían a quien resultara culpable de dichos ilícitos, señalando que esto se ejecutaría a pesar de que la Semarnat extendiera el permiso que los presuntos responsables solicitaban después del daño cometido.
Lamentablemente así sucedió, a pesar del daño, según informó Ibarra Alcántar; nadie ha sido sancionado por la falta cometida y, por el contrario, ahora deforestan la zona con el permiso de la Semarnat y no a escondidas como en un principio se hacía, situación que ha decepcionado a los ejidatarios que tenían la visión de resguardar el único pulmón natural que hay en el municipio.
Hay desilusión en los ejidatarios de Carrillo Puerto y Antonio Amaro, pues las autoridades encargadas de salvaguardar el medio ambiente en Durango solapan los vicios y delitos.
