EL UNIVERSAL-AEE
MÉXICO, DF.- La gran sorpresa de la noche, durante la 48 entrega del Ariel, fue el empate de galardones que se registró entre las películas "Las vueltas del
citrillo", de Felipe Cazals, y "Mezcal", de Ignacio Ortiz. La primera se llevó las caterogías de Mejor Dirección, Mejor Actor (Damián Alcázar), Mejor Coactuación Masculina (José María Yázpik), Vestuario, Maquillaje y Guión Original.
En tanto, la segunda se llevó los Arieles de Plata por Mejor Película, Fotografía, Edición, Sonido, Música Compuesta y Diseño de Arte.
La cinta "Noticias lejanas" le otorgó el Ariel como Mejor Actriz a Mayahuel del Monte, quien venció a Kate del Castillo ("American visa"). Esta última película se llevó un solo Ariel como Mejor Guión Adaptado.
La ceremonia tuvo un pequeño tinte político cuando Mayahuel lanzó un mensaje a los candidatos a la Presidencia para que entendieran que necesitan apoyar a los niños de la calle, a los adultos mayores y a los indígenas,
"Noticias lejanas", dirigida por Ricardo Benet, también triunfó como Mejor Opera Prima, y en Coactuación Femenina (Gina Morett). En la ceremonia, José Yázpik recibió el Ariel a nombre de Felipe Cazals, quien no estuvo presente porque se encuentra fuera del país, en un festival.
Para la Mejor Película Iberoamericana, la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas se decidió por "Sumas y restas", del colombiano Víctor Gaviria.
En un breve y escueto discurso, Diana Bracho, presidenta de la Academia, destacó la labor de esta institución, al recordar la creación de un patronato junto con la UNAM, el año pasado, para intercambios académicos.
Así como la realización de las mesas sobre excepción cultural. En la ceremonia destacó el discurso de agradecimiento de Yázpik, quien dedicó su premio a sus padres y a sus hermanos, pero destacó que para él los reconocimientos no son importantes. Damián Alcázar, quien recibió el sexto Ariel en su carrera,
dedicó su estatuilla a su hijo y comentó que aunque parece que forma parte de casi todas las películas mexicanas de reciente manufactura, en realidad no había ganado un Ariel desde su aparición en "El crimen del padre Amaro".
En la ceremonia de entrega en la que se registraron desperfectos de audio y en la organización, se fetejó el 75 aniversario del cine sonoro en nuestro país.
Para tal efecto, la agrupación de percusionistas Tambuco interpretó una melodía especialmente creada para esta ocasión, titulada "Cine de odio".
El cortometraje documental "Bajo la tierra", acerca de la vida de los mineros, dio el Ariel a sus directores, Lola Ovando y Juan Manuel Sepúlveda; además, de Tin Dirdamal, "De nadie", fue el ganador como Mejor Largometraje Documental, y el Mejor Cortometraje de Ficción fue "El violín", de Francisco Vargas.
Por otro lado, durante la noche imperó un ambiente de desilusión, ante la poca presencia de personalidades de la industria fílmica y del mundo del entretenimiento en general. En un breve sondeo realizado entre algunos miembros de la Academia, se destacó que existió una buena labor de Diana Bracho al frente de la misma durante los dos periodos en que estuvo al
frente, de 2002 a 2006.
