José Refugio Elizarraras se dispara con un arma de fuego en la boca en casa de su madre
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Víctima de constantes y fuertes depresiones, un profesor decidió privarse de la existencia de un balazo en la boca en casa de su madre, informa el agente investigador del Ministerio Público de Delitos contra la Vida y la Salud Personal, Óscar Menchaca Lara.
El hoy occiso llevaba por nombre José Refugio Elizarraras Castañeda, de 52 años de edad y con domicilio en calle 14 número 580 del fraccionamiento Los Álamos, de esta ciudad.
María de la Luz, hermana de José Refugio, vecina del poblado Seis de Octubre, de este municipio, manifestó a las autoridades judiciales que como a las diez y media de la mañana escuchó un disparo y salió al corral a ver qué ocurría, cuando vio a su hermano en el suelo y sangrando de la boca.
Al observar el arma cerca de José Refugio -una pistola .357 Magnum- y percatarse de lo sucedido, de inmediato dio aviso a otro de sus hermanos, de nombre Arturo Elizarraras Castañeda, quien dio parte a las autoridades judiciales.
Al lugar de los hechos acudió el agente investigador del Ministerio Público para dar fe y dispuso que el cuerpo sin vida fuese trasladado al anfiteatro del Servicio Médico Forense (Semefo) donde se le practicó la necropsia de Ley.
El médico legista, Armando Castillo González, dictaminó como causa de la muerte, hemorragia intracraneana producida por proyectil de arma de fuego con orificio de entrada en paladar, sin orificio de salida, ya que la ojiva se fragmentó en la región craneana.
El occiso decidió irse a casa de su mamá, en el citado poblado, donde llegó directo al corral y sus familiares no se dieron cuenta de su arribo a casa, de acuerdo a lo expresado por su hermana.
El cadáver fue identificado para efectos judiciales por María Salazar Ocón, de 46 años, quien dijo al agente del Ministerio Público que José Refugio era profesor y desde tiempo atrás sufría de fuertes depresiones.
Ya en una ocasión anterior, recuerda, hace varios años, encontró a su esposo con una pistola dentro de la recámara y lo persuadió de su intento, pero ahora prefirió acabar con su vida en el corral de la que fuera su casa.
Aumenta la cuenta
Son ya tres suicidios registrados en enero en la Región Lagunera de Durango, precisa el médico forense de la Subprocuraduría de Justicia, Armando Castillo González.
Por lo general, explica el legista, los suicidas potenciales avisan en forma directa o dejan entrever de sus intenciones a sus familiares más allegados, motivo por el cual hay que estar atento ante cualquier sospecha.
Las depresiones provocadas por enfermedades de los nervios y en muchas ocasiones por los excesos del alcohol u otro tipo de drogas, destaca, pueden orillar a las personas al suicidio si no se tratan en forma adecuada.
