LA PRÓXIMA SESIÓN DEL JUICIO SE APLAZÓ PARA EL 12 DE ABRIL
Idagan si el proceso por el que fueron condenados a muerte 148 shiis en la década de los ochentas fue legal.
Bagdad, (EFE).- La decimonovena sesión del juicio contra Saddam Hussein y siete de sus lugartenientes, sin la presencia del depuesto dictador, se centró hoy en averiguar si el proceso que condenó a muerte a 148 shiies fue realizado conforme a derecho.
Durante las dos horas de la vista, el Tribunal Especial iraquí prosiguió con el interrogatorio de Bandar Awad, jefe del Tribunal Revolucionario que en 1983 condenó a muerte a 148 shiies de Duyail por haber participado, el año anterior, en un atentado fallido contra Saddam.
Los 148 sentenciados fueron condenados tras la celebración de un juicio sumarísimo, cuya legalidad se investiga ahora.
Awad, que parecía nervioso mientras respondía a las preguntas del presidente del tribunal, el kurdo Rauf Abdelrahmán, y del fiscal general, Jaffar Mussavi, defendió las condenas a muerte falladas contra los acusados, de confesión shii, e insistió en que habían recibido un juicio justo.
"Tuvieron un juicio justo y la oportunidad de apelar (el fallo)", afirmó Awad, el único de los ocho acusados, todos altos cargos durante el régimen de Saddam Hussein, que se sentó hoy en el banquillo.
Sin embargo, Awad reconoció que los acusados sólo dispusieron de un abogado para su defensa, y que el togado fue seleccionado por el propio tribunal y no por los imputados.
"Fue una corte legal y justa", insistió Al Bandar, quien explicó que los acusados habían confesado su participación en el intento de asesinato y que aseguraron que lo realizaron "con instrucciones del Gobierno de Irán para dar un golpe al régimen de Irak".
Awad juró por Dios que durante el juicio en contra de los acusados shiies él deseaba que fuesen inocentes.
Sin embargo, el antiguo magistrado justificó su decisión de condenarles a la pena capital en que los acusados confesaron su participación en el intento de asesinato contra Saddam.
"Quería justicia y deseaba que los acusados no fueran hallados culpables. Estábamos contentos cada vez que un acusado era declarado inocente", agregó Awad.
"¿Señor juez, piensa que yo tenía enemistad con los acusados para condenarlos a la pena capital?", preguntó Awad al jefe del tribunal para insistir en que sólo había actuado conforme a la Ley.
Además de Saddam, entre los acusados por la matanza de Duyail figura el ex vicepresidente iraquí, Taha Yasin Ramadan, y el hermanastro de Saddam, Barzan Ibrahim Al Hasan, jefe de los servicios de inteligencia en la época en la que ocurrió el intento de asesinato contra el presidente y la reacción de la seguridad iraquí.
Tras concluir la vista, el juez encargado del caso decidió posponer la próxima sesión hasta el próximo miércoles, 12 de abril, casi seis meses después de su inicio, el pasado 19 de octubre.
La sesión de hoy se desarrolló en un ambiente más tranquilo que la anterior, celebrada ayer, cuando el depuesto dictador iraquí compareció en tono desafiante ante el tribunal y aprovechó la sesión para acusar al Ministerio actual del Interior de torturar y asesinar a miles de iraquíes.