Nuevamente los deudos de los mineros fallecidos en Pasta de Conchos tomaron las calles de San Juan de Sabinas para exigir a Industrial Minera México información sobre las labores de rescate. En Oaxaca los maestros realizaron una multitudinaria marcha para demandar la destitución del gobernador, Ulises Ruiz.
Ambos problemas son relativamente añejos, sin embargo el Gobierno Federal poco ha hecho para resolverlos y a tres días de las elecciones, representan todavía un foco rojo que permanece encendido. En Coahuila alrededor de 200 personas realizaron una marcha con pancartas para denunciar que la empresa minera poco a poco ha cerrado el diálogo con los familiares de los obreros fallecidos el 19 de febrero.
En Oaxaca los maestros tienen como principal demanda ante el Comité Ejecutivo del SNTE, que de las cuotas que aportan de 4 millones y medio de pesos a esa organización no se les regresa ni el uno por ciento es decir, sólo reciben 270 mil pesos cada mes.
Por si fuera poco, existe preocupación por lo que pueda llegar a suceder en entidades como Baja California, Sinaloa y Jalisco, que se han mantenido en los primeros lugares de ejecuciones del narcotráfico además de la violencia que existe en regiones como Guerrero y Sinaloa.
La estrategia del Gobierno Federal fue dejar crecer los problemas y en ocasiones incluso ignorarlos, a unas cuantas horas del proceso electoral los focos de alarma se mantienen encendidos a pesar de los discursos en que declara que todo está bien y no pasa nada. Esperemos que la jornada del próximo domingo se lleve a cabo en un ambiente de paz y tranquilidad por el bien de la nación.
