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MÉXICO, DF.- La rara enfermedad de una niña, una madre desesperada, una desértica ciudad envuelta en niebla y plagada de secretos, son los misterios que habrán de descifrarse en Terror en Silent Hill, película basada en el videojuego Konami, que a partir desde ayer se exhibe en las salas de México.
Rose, desesperada por encontrar la cura para la enfermedad de su hija Sharon, se rehúsa a aceptar la recomendación médica de ponerla en una institución psiquiátrica, por lo cual viaja con ella a Silent Hill, el lugar que la pequeña menciona de manera continua mientras duerme.
Aunque su esposo Christopher se opone firmemente, Rose está convencida de que la misteriosa población tendrá todas las respuestas. Conforme su auto se aproxima a los límites de la ciudad desértica, aparece una figura en el camino, obligándola a girar de forma abrupta e impactarse.
Cuando vuelve en sí, Sharon no está y de repente Rose, acompañada por una oficial (Laurie Holden) de una población cercana, inicia una investigación en Silent Hill para encontrar a su hija.
De inmediato se hace obvio que su destino, sin mencionar los devastadores incendios de carbón que han atacado a la población, es diferente a cualquier lugar que ha visitado: con mucha niebla, habitado por una variedad de seres extraños y fantasmales, y cubierto por una oscuridad viviente que literalmente transforma todo lo que toca.
En la cinta Terror en Silent Hill, una co-producción de Canadá y Francia, actúan Radha Mitchell, Sean Bean, Laurie Holden, Deborah Kara Unger, Kim Coates y Tanya Allen, bajo las órdenes de Christophe Gans, que basó su trabajo en un guión de Roger Avary, reconocido por Tiempos Violentos y Las Leyes de la Atracción. La producción es la adaptación al cine de uno de los mejores juegos de terror de todos los tiempos, el Konami, creado por Akira Yamaoka.
Para el director Christophe Gans, el atractivo de realizar el filme radica en sus características de otro mundo, su mezcla de elementos de horror, ciencia ficción y drama, con lo cual se niega a clasificarla dentro de ningún género conocido.
?Esta es una historia clásica de al filo de la realidad, que maneja emociones y lo sobrenatural. Implantada en diferentes dimensiones y vinculada por el hecho de que todos están sufriendo, caería entre la tradición del drama romanesco y la ciencia ficción surrealista?, comentó Gans.
Añadió: ?Lo que me gusta es que Silent Hill es un lugar actual, pero una vez que llegas ahí estás condenado a deambular para siempre. Desde luego, es absolutamente mitológico; no es para nada una historia normal?.
