A 67 días del crimen, la PME no logra identificar al responsable
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Luego de 67 días de ocurridos los hechos, la Policía Ministerial del Estado no tiene avances significativos que permitan dar con la identidad del solitario sujeto que dio muerte de cuatro balazos al médico Raúl García Gómez, encargado del Área de Cirugía de la Clínica 51 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
El crimen que consternó en su momento a la comunidad médica de la Región Lagunera, ocurrió a las 7:35 horas de ese lunes 13 de marzo en la citada clínica, localizada en la colonia Chapala de esta ciudad, cuando llegó el médico a bordo de su camioneta Chrysler Durango, color rojo, placas EZU-6111 de Coahuila.
Luego de estacionar su camioneta, García Gómez descendió y caminó hacia el otro extremo del vehículo para abrir la portezuela del copiloto y sacar algunos documentos, sin percatarse que se acercaba un sujeto con cubre-boca que no llamaba la atención, toda vez que así llegan algunos pacientes a la clínica.
Ocupado en la búsqueda de los documentos, no vio cuando el desconocido se aproximó hasta él, por su costado derecho, unos tres o cuatro metros y sacó una pistola con la cual le hizo los disparos que entraron por la portezuela abierta.
El médico sintió los impactos y su primera reacción fue correr para ponerse a salvo, pero ya iba herido y cayó a unos tres metros de la parte trasera de la camioneta, en tanto su victimario se daba a la fuga por la cerca de barrotes metálicos que delimita el estacionamiento, de poco más de dos metros de altura que muy fácil alcanzó al trepar unas bolsas de basura que se encontraban junto a la cerca y brincó para perderse entre las calles.
Al filo de las diez de la mañana del mismo día murió el médico cuando era intervenido por sus compañeros en el quirófano que hicieron todo lo posible por salvarlo, pero el daño causado por las balas era irreversible.
Daniel Alejandro Ramírez Amador, médico legista que practicó la necropsia, precisó que el cadáver presentaba cuatro impactos de bala; uno en sedal (de rozón) en muslo derecho, otro en antebrazo del mismo lado, uno más en la región de la muñeca derecha con entrada y salida y el que resultó mortal, con entrada en flanco derecho, en el séptimo espacio intercostal, sin salida.
Caso difícil
El agente investigador del Ministerio Público de Delitos contra la Vida y la Salud Personal, Aurelio Urbina Suárez, reconoce que es un caso muy difícil, pues todo indica que el autor del crimen no es de la región.
?Según las investigaciones realizadas, el individuo que asesinó al doctor, fue visto desde la noche anterior al crimen en el interior del hospital, con lo cual se pudo elaborar un retrato hablado?, dice Urbina Suárez.
Es muy probable, añade el agente del Ministerio Público, que se comisione de nueva cuenta a elementos de la Ministerial a Chihuahua, donde se podrían tener mayores datos del presunto asesino, toda vez que el médico estuvo internado un año en el Cereso como autor del crimen de dos hermanos de aquella ciudad, pero luego salió libre por falta de elementos para procesarlo.