Ofrecerán el melón en China pero falta poner a funcionar la infraestructura existente para exportar
TLAHUALILO, DGO.- Por falta de créditos, subsidios y organización, los productores de melón no pueden poner en marcha la infraestructura existente para exportar a Estados Unidos y otros países de Asia, afirmó Pedro Pérez Barraza, dirigente del Comité Municipal Campesino.
Si los alcaldes y empresarios de esta región viajarán a China este día, deberán llevar un proyecto bien fundamentado sobre la producción y calidad del melón en sus diferentes variedades, no pueden ofrecer algo que desconocen, dijo.
Comentó Pérez Barraza que ?hace tiempo estuvimos a punto de contactar a un grupo de empresarios japoneses en la embajada de México; el objetivo era motivarlos a invertir en una planta deshidratadora en Tlahualilo, pero no fue posible, salieron de emergencia a otro país y hasta la fecha no ha sido posible tener una entrevista?.
?Ahora nos enteramos por medio de El Siglo de Durango que los empresarios, funcionarios estatales y municipales se entrevistarán con varios dueños de compañías para ofrecer varios productos de Durango, entre los que destaca el melón. Me gustaría que nos hubieran pedido una opinión o un proyecto para llevar más sustento y concretar negociaciones?, añadió.
Los fruticultores de Tlahualilo tienen lavadora, enceradora y empacadora, además de frigoríficos; lo único que requieren es apoyo económico para acopiar el melón, además de subsidios que permitan competir en precio con otros países
A la vez, el sector frutícola de Tlahualilo requiere de los recursos económicos vía créditos o subsidios para elevar los niveles de productividad e industrializar el melón, pues desde hace tiempo anhelan contar con una deshidratadora y envasadora, lo que permite a los campesinos obtener un valor agregado.
El año pasado les facilitaron 250 mil pesos para la cosecha, lo cual será cubierto para mantener la confianza de las instituciones.
Otro aspecto que deben superar es la organización del sector frutícula, es decir, unirse más para ponerse de acuerdo sobre la variedad de semilla, precio y demás estrategias, a fin de no permitir especulaciones a los intermediarios que terminan por convencer a los campesinos de vender barato.
