EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Y no tienen que esperar a ser grandes, porque ya lo son... Con una muestra de gran agilidad, destreza y estudiada técnica, los Niños Virtuosos del Cáucaso sorprendieron al público lagunero las dos funciones que ofrecieron ayer en el Teatro Isauro Martínez.
Pequeños de edad, pero grandes a la hora de salir al escenario, los niños originarios de Georgia se llevaron tremenda ovación del público que llenó el teatro a su máximo capacidad, tanto en la presentación de las 6:00 de la tarde como en la de las 8:30 de la noche.
Agilidad, destreza, elegancia y orgullo son las palabras que mejor definen a esta agrupación, encargada de llevar por el mundo las danzas tradicionales de la región del Cáucaso.
En dos actos y acompañados en vivo de un acordeón y un tambor, los niños representaron la más pura tradición de su país, con los trajes originales y las zapatillas especiales que, a diferencia de las del clásico ballet, no tienen refuerzo y requieren de años de preparación para poder usarlas.
Desde una sencilla fiesta hasta una boda, pasando por una simple pelea y hasta un crudo combate a cuchillos y sables, los Niños del Cáucaso manifestaron las formas de organización social y el sentir de su población.
Y demostraron que en Georgia los hombres son los que bailan, porque los niños fueron los verdaderos protagonistas de las danzas y las niñas se convirtieron en un simple, pero bello adorno.
Siempre altivos, orgullosos, fuertes, ellos fueron los encargados de los números más vistosos. Como a la hora de mostrar su maestría con los cuchillos o los sables, pero también al momento de dar vueltas sobre el escenario únicamente con la ayuda de sus rodillas y saltar para caer e inmediatamente rebotar.
Por su parte las pequeñas pusieron la gracia y la timidez, la belleza capaz de provocar una guerra y hábil para terminarla.
Sobre el escenario estuvieron 30 niños, que en 20 números contaron con destreza, dedicación, virtuosismo y técnica un poco de la historia del Cáucaso. Mención aparte merece el solo que realizó uno de los pequeños con una especie de flauta tradicional, así como el solo de tres pequeños que tocaron impresionantemente el tambor.
Realmente contagiaron a los asistentes con su alegría y agilidad, siempre recibieron el aplauso y hasta fueron despedidos de pie en ambas funciones, hecho que los pequeños agradecieron con la repetición del último movimiento.
Al ritmo del acordeón y del tambor aparecieron y al mismo ritmo se despidieron, en medio de asombrosos saltos, piruetas y siempre sobre puntillas, sello característico de los Niños Virtuosos del Cáucaso.
El programa
Los Niños Virtuosos del Cáucaso dieron muestra de su gran habilidad.
ACTO I
1.Partsa. Danza en círculo con todo el grupo.
2.Kartuli. Baile con reglas definidas.
3.Khorumi. Se compone de cuatro partes: búsqueda de un lugar apropiado para los guerreros, aproximación del enemigo, batalla, derrota y fuga.
4.Acharuli. Proviene de las regiones montañosas y se baila en días de fiesta y bodas.
5.Samaya. Ejecutada por tres mujeres para celebrar la fiesta matrimonial.
6.Khanjluri. Baile con cuchillos.
7.Salamuri. Ritmos típicos interpretados con tambor.
8.Simd. Baile de bodas.
9.Dolebi. Ritmos típicos con tambores.
10.Shejibri. Danza masculina.
ACTO II
1.Svanuri. Baile de la región montañosa.
2.Khonga. Representa una invitación.
3.Parikaoba. Combate a sables.
4.Djeirani. Danza popular con espadas.
5.Kintauri. Baile de los artesanos.
6.Dolebi. Número musical con instrumentos nacionales.
7.Kazbeguri. Baile de la villa Kazbegi.
8.Kasbesk. Danza de niñas graciosas.
9.Karachokheli. Danza que representa a los artesanos del viejo Tbilisi.
10.Mtiuluri. Baile regional de las montañas.