AP
BEERWAH, AUSTRALIA.- El presentador australiano de televisión Steve Irwin, mejor conocido como "El Cazador de cocodrilos" recibió un sentido y concurrido tributo póstumo en un funeral público al que asistieron alrededor de cinco mil personas.
El Primer Ministro John Howard se encontraba entre los asistentes al homenaje público celebrado en el Zoológico de Australia.
Howard recordó a Irwin por el amor a su país.
"Steve Irwin conmovió los corazones de los australianos y conmovió los corazones de millones en el mundo de una manera muy especial", dijo el Premier.
"Lo hizo porque tenía esa cualidad de ser sincero, de ser auténtico, de ser incondicional y de tener un gran entusiasmo por la vida", manifestó Howard en el homenaje de una hora que según autoridades pudo llegar por televisión a unos 300 millones de personas en el mundo.
"Hemos perdido a un amigo, a un campeón", dijo el actor Russell Crowe en un mensaje grabado. "Tomará algún tiempo acostumbrarse a eso".
En la ceremonia fue dejado un lugar vacío, para el mismo finado y popular Irwin. En la tribuna se encontraban su viuda, Terri, oriunda de Estados Unidos, y sus dos hijos, Bindi de ocho años y Bob de dos, todos vestidos con el traje caqui de cazador que acostumbraba el intrépido presentador.
Activo ambientalista y dinámico conductor de televisión, Irwin, de 44 años, murió el 4 de septiembre al ser picado en el pecho por una raya cuando filmaba para un programa de televisión en la Gran Barrera de Arrecifes. Su familia organizó un funeral privado el nueve de septiembre en el Zoológico de Australia.
Afirma Cousteau que interfería con la naturaleza
El explorador marino Jean-Michel Cousteau dijo que, aunque lamenta la reciente muerte de Steve Irwin, discrepaba del modo en que "El Cazador de cocodrilos" interfería con la naturaleza.
Mientras promocionaba en Los Ángeles un nuevo especial para televisión titulado Jean-Michel Cousteau: Ocean Adventures, America?s Underwater Treasures, Cousteau lamentó la muerte de Irwin.
"El deceso de Irwin fue muy, muy desafortunado", señaló.
El explorador dijo que sentía un gran respeto por Irwin, a quien no llegó a conocer personalmente, por su mensaje ambientalista.
Sin embargo, agregó que el fallecido presentador interfería con la naturaleza.
"Le saltaba encima a los animales, los agarraba, los sujetaba y tenía este modo espectacular y dramático de presentar las cosas. Por supuesto, eso va muy bien con la televisión", dijo Cousteau.
"Vende, atrae a mucha gente. Pero yo creo que es muy engañoso. Uno no se mete con la naturaleza, uno sólo la mira. Y esa es la razón por la que yo aún estoy vivo. He estado buceando por más de 61 años, muchos más de los que él tuvo de vida, y no me meto con la naturaleza", agregó.
