Durango

Surgen viejas pugnas en San Juan del Río

El Municipio concilia intereses entre productores y pide intervención de Conagua para ofrecer solución a la distribución del agua

SAN JUAN DEL RÍO, DGO.- Al borde de la violencia se encuentran ejidatarios de El Resbalón y El Ranchito, por la disputa del agua de una represa; el Municipio intervino a fin de buscar solución al problema a través del diálogo y la concordia.

Incluso, ayer los comisariados de estos lugares y el alcalde Luis Alonso Villarreal Jiménez pidieron la intervención de la Comisión Nacional del Agua para que realice un estudio y distribuir el vital elemento según las necesidades.

Informó Macario Manuel Mijares Hernández, secretario del Ayuntamiento, que este problema data de más de 70 años. Recuerda como -oriundo de este municipio- que hace aproximadamente 35 años se registró un enfrentamiento donde salieron a relucir las armas de fuego.

En ese suceso hubo necesidad de que intervinieran elementos del Ejército para decomisar armas y evitar desgracias. Desde entonces la situación no pasa de simples discusiones, pero esta semana las cosas se empezaron a poner tensas.

La represa se localiza en terrenos del ejido Francisco de Ibarra, mejor conocido como El Ranchito, y los campesinos de El Resbalón utilizaron tubería de dos pulgadas para sacar agua y regar sus parcelas, pero al impedírselos empezaron los problemas.

Dicha presa tiene poca capacidad de agua, debido a la sequía, y los de El Ranchito únicamente la están utilizando para el ganado, mientras que sus vecinos también la quieren para sus parcelas y eso no es posible porque en poco tiempo se quedarían sin una gota del vital líquido, de ahí el impedimento para administrarla lo mejor posible.

Esto no les parece a los de El Resbalón y se rebelaron exigiendo más porción de elemento hídrico, aflorando la vieja disputa. Por fortuna se enteraron las autoridades, las cuales intervinieron de manera oportuna para buscar conciliar intereses y evitar la violencia.

Cabe señalar que el agua de la represa llega de un manantial del ejido Ciénega Grande, cuyos productores siempre han procedido de buena fe; de lo contrario, ya hubieran dejado sin agua a los dos ejidos en pugna.

Mijares Hernández abundó que antes no había problema porque había mucho agua en la represa, pero ahora con la sequía recurrente es limitada, lo que genera la diputa del abasto por parte de los ejidos ya mencionados. Sin embargo, las autoridades municipales esperan llegar a un buen acuerdo entre ambos grupos, una vez que Conagua distribuya ese vital elemento.

Se dicen dueños

Productores del ejido Francisco de Ibarra comentan que hace muchos años campesinos de El Resbalón empezaron a construir sus viviendas dentro de sus terrenos, y aunque en muchas ocasiones se les pidió retirarse, nunca lo hicieron.

Ahora también quieren apropiarse del agua, lo cual no es justo, pues la poca existente en la represa es para sostener el ganado, no para regar parcelas.

Por su parte, los ejidatarios de El Resbalón aseguran que esas tierras les pertenecen y por eso decidieron construir sus viviendas.

Al respecto, el Secretario del Ayuntamiento señala que el problema es el agua; los habitantes de El Resbalón cuentan con un pozo de agua potable, en tanto que los de El Ranchito no carecen de este servicio. La represa solamente la utilizan para las actividades pecuarias, sobre todo en estos tiempos de sequía.

Leer más de Durango

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Durango

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 218289

elsiglo.mx