CANATLÁN, DGO.- El campo debería ser el sector más importante, pero lamentablemente está descuidado por las autoridades, en las comunidades rurales se observa mucha pobreza, hasta el momento no han valorado el esfuerzo de los productores.
Los precios de sus cosechan no son alentadores, lo cual influye a que muchos prefieren dejar el oficio de la agricultura para dedicarse a otras actividades más remunerativas, incluyendo a quienes emigran al extranjero en busca del ?sueño americano?, afirmó el presbítero Ambrosio Arámbula Herrera.
Para el párroco del Templo San Diego de Alcalá, el no valorar el producto del trabajo del campesino influye en el abandono de la tierra. A estas alturas en que hay optimismo porque esperan una buena cosecha de frijol y maíz, no saben a cómo se los pagarán.
Siempre el campesino lleva las de perder. Quienes más ganan en este negocio son los intermediarios y las empresas comercializadoras, de ahí que no recuperen los gastos de inversión, tal como lo señalan los mismos agricultores.
También señaló el guía de los católicos de esta región que muchos campesinos viven en la dependencia, están a la espera del apoyo y no trabajan, asumió malos hábitos, las tierras las pasan al tercio o las rentan, en fin en el problema de la pobreza rural todos son responsables, Gobierno, productores, incluyendo a la Iglesia.
Es difícil pero posible abatir la pobreza a sus más bajos niveles con la participación de todos, pues es un mal crónico que data de muchos años, es preciso responsabilizarse todos para sacar adelante al sector primario.
Por su parte el presbítero Jesús Cuevas, párroco de Francisco I. Madero, municipio de Pánuco de Coronado, señaló en términos muy generales que falta unidad y organización en el campo, para exigir mejores precios de sus productos y elevar el nivel de vida.
Considera que hablar de la pobreza en el campo es muy complejo, influyen muchos factores como los ya mencionados y por eso les dan ?atole con el dedo? a los agricultores.
Malos hábitos
-El ejido Villa Unión, municipio de Poanas, tiene 543 derechosos, de los cuales solamente el 20 por ciento trabaja la tierra, el resto la renta o pasa al partido.
-Trabaja la tierra el 27 por ciento de los agricultores del ejido Ignacio Ramírez, municipio de Guadalupe Victoria, algunos no saben ni dónde está su parcela, no la conocen, nunca la han trabajado.
-El 30 por ciento de los ejidatarios de Graceros, municipio de Vicente Guerrero, trabaja la tierra, el resto la renta o la pasan al tercio.
-Labora la tierra sólo el 38 por ciento de los ejidatarios de Ignacio Allende, municipio de Guadalupe Victoria.
FUENTE: Comisariados ejidales.