Muchas personas aún están atrapadas en sus casas, mientras, las operaciones de rescate se ven entorpecidas por los escapes de gas natural.
Washington, (EFE).- Los tornados y vendavales que azotan varios estados del centro y sureste de Estados Unidos desde el domingo se han cobrado al menos 27 vidas y han dejado una estela de destrucción a su paso, informó hoy la cadena de televisión CNN.
Las autoridades locales confirmaron varias muertes en el noroeste del estado de Tennessee -la zona más castigada por las inclemencias meteorológicas, en Misuri e Illinois.
Muchas personas aún están atrapadas en sus casas destrozadas por los temporales, mientras que las operaciones de rescate se ven entorpecidas por los escapes de gas natural y por los apagones producidos por el derribo de postes del tendido eléctrico.
"La destrucción en algunas zonas por las que ha pasado (la tormenta) es casi total", dijo a CNN Jeffrey Holt, sheriff del condado de Dyer, en Tennessee, quien apuntó que la cifra de víctimas podría aumentar a medida que avanza el día.
En el este de Misuri, un hombre murió aplastado al caer un árbol y otro de 42 años falleció dentro de su casa móvil.
La policía confirmó el fallecimiento de una tercera persona en Braggadocio (también en Misuri), aunque no dio detalles sobre el motivo de la muerte.
En el sur de Illinois un hombre murió en una tienda de ropa cuando la estructura fue arrasada por los fuertes vientos.
Parte de las víctimas de Tennessee fallecieron al norte del condado de Gibson, donde el huracán arrasó un grupo de casas situadas cerca de una planta de procesamiento de alimentos.
Los tornados causaron desde las últimas horas del domingo los mayores daños en un área que se extiende desde el noreste de Arkansas hasta el sureste de Misuri y la parte occidental de Tennessee, el estado más castigado.
El Servicio Nacional de Meteorología indicó que se habían registrado tornados en al menos cinco condados al oeste de Tennessee (Dyer, Carroll, Hayword, Gibson y Fayette) y que las tormentas causaron amplios daños.
Los vendavales y tornados también castigaron, los estados de Ohio, Illinois e Indiana.
El Servicio Nacional de Meteorología informó además que "numerosas casas" fueron destrozadas en la ciudad de Hopkinsville (al suroeste de Kentucky) y que también se registraron daños materiales en autos y edificios en la localidad de Lewisburg.
La Cruz Roja se ha desplegado en la zona para ayudar a los habitantes que han abandonado a sus viviendas a encontrar refugio.
