El Universal-AEE
MADRID, ESPAÑA.- Roto por el dolor y apenas 15 días después de la muerte de Rocío Dúrcal, su esposo Antonio Morales, Junior, concedió una entrevista a la revista Hola!
En ella reconoce que con la muerte de Marieta, como se llamaba en realidad la artista, se le ha ido más de la mitad de su vida y hubiera dado cualquier cosa porque en lugar de haberse ido ella se hubiera ido él, y se muestra convencido de que desde el cielo la cantante cuidará de él.
?Yo era una persona solamente para ella. La quería mucho y cada vez más, cada día nos encontrábamos mejor?, cuenta para el semanario.
?No habrá nadie que pueda sustituir a mi mujer ni quiero que la haya. La voy a recordar siempre porque va ser el ángel que me guíe en esta vida?, asegura.
A lo largo de siete páginas, el que fuera cantante de los Brincos relata cómo fueron sus más de 36 años al lado de Rocío Dúrcal, desde que se conocieron hasta sus últimos días, y el momento de su muerte.
Recuerda que cuando estaban los dos sanos (a él en México en 1993 le detectaron una pancreatitis a la que los médicos pronosticaron que no iba a sobrevivir), ella le dijo que si alguna vez le pasaba algo, que por favor la incinerara y repartiera sus cenizas entre España y México, su segundo país. Y así lo hará.