EL SIGLO DE TORREÓN
SAN PEDRO, COAH.- La situación de Raúl Castelán Hernández, jornalero originario de Tantoyuca, Veracruz, aún no se define. De acuerdo a María Isabel López Carvajal, representante del Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi, ya se turnó el caso a la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA) ubicada en Torreón, a fin de que al trabajador se pague su salario.
El Siglo de Torreón en la edición de ayer publicó que Raúl, junto con su hija Fabiola, firmó un contrato por 60 días para trabajar en los campos agrícolas de Jesús Dorantes Gómez, donde a consecuencia de un accidente en un brazo ya no pudo trabajar.
Refiere que fue enviado a recibir atención médica en el Centro de Salud de esta ciudad y posteriormente al Instituto Mexicano del Seguro Social donde no le dieron la incapacidad correspondiente. Ahora con los integrantes del Organismo No Gubernamental y con la demanda laboral interpuesta, espera el pago de 26 días trabajados que Dorantes Gómez le negó.
Por cierto, Raúl es uno de los tantos campesinos que llegan del sur del país a trabajar en la pizca del tomate, la cebolla o el chile en la pequeña propiedad ubicada en San Isidro y que tiene por nombre, Hortalizas de La Laguna, donde actualmente se encuentran laborando dos mil indígenas de Veracruz y de Huejutla, Hidalgo, en condiciones infrahumanas, así lo constató en una visita realizada el miércoles a El Siglo de Torreón.
López Carvajal ayer acudió a la Junta de Conciliación y Arbitraje donde el procurador Alberto Sánchez y Joel Orozco le comentaron que en los últimos días liquidaron a tres jornaleros que también salieron de los campos agrícolas de Dorantes Gómez por no soportar las condiciones de vida que ahí les ofrecen.
Dichas personas al igual que Raúl, viven en unas galeras con mínima ventilación donde en unas literas sin colchón, duermen hasta 40 personas entre ellas niños y parejas de matrimonios. Los baños están sumamente sucios y la comida que les ofrecen, deja mucho qué desear.
Los integrantes del Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi, hoy a las nueve llevarán el citatorio para que el representante legal de Jesús Dorantes Gómez, se presente a la junta el lunes a las diez de la mañana a fin de que Raúl reciba el dinero que se le está negando y con el cual piensa regresar junto con su hija a su lugar de origen.
El caso
La situación de Raúl Castelán Hernández, jornalero originario de Tantoyuca, Veracruz, aún no se define.
María Isabel López Carvajal, representante del Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi, dijo que ya se turnó el caso a la Junta Local de Conciliación y Arbitraje ubicada en Torreón a fin de que al trabajador se le pague su salario.
Raúl es uno de los tantos campesinos que llegan del sur del país a trabajar en la pizca del tomate, la cebolla o el chile en la pequeña propiedad ubicada en San Isidro y que tiene por nombre, Hortalizas de La Laguna.
Actualmente ahí se encuentran laborando dos mil indígenas de Veracruz y de Huejutla, Hidalgo, en condiciones infrahumanas.
FUENTE: Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi