En Santa Rita hubo esta semana un trabajo completo de ajustes en el accionar futbolístico. Benjamín Galindo paró varias veces las acciones para hacer correcciones, tanto al ir al ataque como cuando entraba en funciones la línea defensiva.
Y siguió ocupándose de lo que debe hacer la línea media, ahí donde el mismo ?Maestro? tenía su campo de acción en su tiempo como jugador. Volvió a insistir en el manejo del balón y en la conservación de éste, en lo que él fue un líder.
Algo se mejoró al respecto frente al América, pero analizando el video vio que no hubo mucha precisión, sobre todo al momento de recibir el esférico en los pases largos, pidiendo por ello mayor aplicación en este tipo de servicios.
Y es que sabe perfectamente cómo se las gastan en el Rebaño, donde todos quieren sobresalir, y donde las individualidades dan paso al juego de conjunto para mantener un sistema y una tradición de mucho, muchísimo tiempo.
Ante el Guadalajara podría haber pocos cambios en relación con lo que se vio ante el América. Hoy no hay tiempo, ya que no puede desaprovechar las oportunidades. Al llegar a casi un tercio del campeonato cada fecha cuenta casi al doble.
Eso, especialmente para los equipos de baja producción y de porcentaje a la baja, aproxima a quienes tengan esos números a la famosa zona del descenso, donde cada encuentro se vive con angustias y presiones.