Muchos son los que han regresado al Estadio de la Revolución para ver en acción a este remozado Vaqueros que quiere agradar y que desde todos los ángulos muestra otra cara y mejores atenciones de las que tuvo en el pasado reciente.
Ahí estuvimos la noche del martes viendo el despegue de la serie ante Tuneros de San Luis y la entrada pudimos calificarla de excelente, no estaba lleno el estadio y los que acudimos nos sentíamos cómodos en las bien acondicionadas localidades.
La tarde, que había sido sofocante por la onda cálida que ya se abate en la región, refrescó un poco al atardecer lo que nos permitió disfrutar de un partido en el que parecía nos enfilaríamos a una victoria con un cuadrangular de Ramón Espinoza.
Pero eso sería todo a la ofensiva anaranjada que fue controlada por Enrique Quiñones, sin embargo la gente está entusiasmada apoyando a su equipo. Carlos de la Garza, ahora gerente del club, anda por entre las butacas viendo que todo esté bien atendido.
Nos llamó la atención no encontrar malla arriba de las butacas que están atrás de ?home?, ahí donde en ocasiones caen las pelotas de foul, quizá porque le quitaría visibilidad a otras secciones o por diferentes causas, pero ¿no habrá peligro?
Vimos a familias completas, con niños pequeños que son llevados en brazos por sus padres, pues el beisbol se presta para estar al lado de los seres queridos disfrutando un buen espectáculo. Ojalá mejore el conjunto de casa, sobre todo a la ofensiva.
