Mientras que en México se unificaban las críticas por la derrota que sufrió el seleccionado azteca ante Francia, ayer en Zagreb, la capital de Croacia, la selección de Irán por poco consigue una victoria ante el equipo croata.
Los comentarios de quienes vieron el encuentro dijeron que los iraníes habían ofrecido un partidazo, mostrando viveza, mucha iniciativa y adelantándose en las jugadas a los experimentados rivales, famosos en torneos mundiales.
Irán será el primer rival que tendrá México en este Mundial y la euforia que provocó el empate ha invadido de alegría a los habitantes de Irán, que ahora sienten que tendrán un inicio triunfante en esta justa.
Croacia, dicen, se vio mal por el empuje de sus contrincantes, sobresaliendo por los iraníes sus goleadores Ali Karimi y Arash Borhani autores de los goles, así como la gran actuación del arquero Ebrahim Mirzapour bajo la dirección del técnico Branko Ivankovic.
Los croatas necesitaron de un penal rigorista para igualar los cartones y tras el partido las críticas arreciaron para ese equipo que dicen tendrá que mejorar mucho si quiere conservar el prestigio que dejó en otros mundiales.
Los mexicanos tuvieron ayer un día tranquilo y no pareció molestarles mucho la derrota ante Francia, confiando en que las cosas mejorarán ante Holanda el próximo jueves. Por otro lado, se dice que los mexicanos no quieren mostrar sus armas secretas todavía.