Alemania consiguió ayer su primera victoria en este Mundial pero no dejó del todo complacidos a sus seguidores, que por momentos vieron un cuadro impreciso, ante unos rivales ticos que mostraban más entusiasmo que buen futbol, salvo los goles de Wanchope.
Sin su capitán Michael Ballak, los germanos no parecieron el equipo que tanto han pregonado en el país anfitrión de esta justa, considerándolo favorito para ganar el campeonato. Por momentos parecía bajar el ritmo y asomar fallas defensivas que parecía que los costarricenses podrían aprovechar.
Sin embargo, tres puntos son oro molido y le dan la posibilidad de mejorar su actuación cuando enfrenten a los polacos, ayer mismo de capa caída por su derrota ante el asombroso equipo de Ecuador, donde destacaron Tin Delgado y Carlos Tenorio.
Esa victoria de los futbolistas ecuatorianos de 2 goles a 0 ante los polacos, los pone en los cuernos de la Luna y los encamina a lo que podría ser su segunda victoria ante el equipo de Costa Rica que si estuvo mal antes del Mundial podría estar peor posteriormente por el gran ánimo de Ecuador.
Con los de Ecuador vimos la efectividad de los viejos conocidos de la afición, Gionanny Espinoza defendiendo, así como los buenos servicios de Edison Méndez, quien militó con Santos Laguna y quien por falta de oportunidades prefirió regresar a su país que seguir aquí en la banca.
A la ceremonia inaugural no asistió el estro argentino, Diego Armando Maradona, por más que lo buscaron las cámaras, y en cambio Pelé estuvo en el centro de la cancha y en las tribunas, donde todo mundo quería tomarse la fotografía con él astro brasileño.