Malos aficionados, que afortunadamente no son muchos, le han hecho mucho daño al equipo del Santos. Creemos que no son seguidores del conjunto de la Comarca, porque éstos tienen como propósito principal apoyar al equipo en todos sentidos.
Ahora se habla de volver a castigar al conjunto albiverde porque un pequeño grupo estuvo lanzando insultos al jugador rayado Felipe Baloy, con tema discriminatorio, lo que de comprobarse causará daños.
Es muy lamentable que esto ocurra en la Comarca Lagunera, a donde ha llegado gente de todas partes del orbe para ayudarla a progresar, sin importar razas ni credos. Esta es una comunidad abierta a todo mundo, y se ha caracterizado por su hospitalidad.
Ni en broma se aceptan las ofensas hacia el prójimo. Debemos realizar una tarea de concientización para que La Laguna siga siendo una tierra plural, abierta a todo mundo, y donde podamos vivir en paz y armonía ayudándonos unos a otros.
Ni la violencia ni los insultos son aceptados en ningún lugar, menos donde se practica el deporte. El Corona debe ser una casa a la que deben llegar todos y que ahí vayan cada vez más familias completas, dentro de un ambiente sano y agradable.
Antes los mismos aficionados cuidaban el orden y señalaban con índice de fuego a los que cometían desmanes o alteraban el orden. Ojalá haya una campaña para que todos cuidemos la casa y para que a ella lleguen todos los que así lo deseen.