Desde su nacimiento, Santos Laguna ha tenido que enfrentar muchas adversidades, desde problemas económicos en su nacimiento, hasta zarandeos que le han dado sus enemigos gratuitos, entre ellos muchos comunicadores capitalinos.
Esto no es nuevo. Cuando existieron Laguna y Torreón, del centro de la República no había simpatías para estos cuadros norteños, que decían estaban muy lejanos y sin mucho poder económico, por lo que fácilmente les hacían el feo.
Santos nació con ciertas penurias y poco a poco fue acercando gente que lo apoyara para subsistir, hasta que la empresa cervecera lo rescató y lo impulsó. Pero sus enemigos estarán siempre buscando la forma de hacerle daño.
Ahora éstos aparecen en las tribunas en número muy reducido y afortunadamente los verdaderos seguidores del Santos están dispuestos a denunciarlos para que no vuelvan más al estadio y vayan a hacer daño a otra parte.
Con eso de los dizque actos discriminatorios contra un jugador del Monterrey, algunos medios de fuera se han dado vuelo atacando al Santos y a su afición. Por ello es importante seguir concientizando a los que vayan al Corona para mostrar la otra cara.
Para que se vea el verdadero rostro de lagunero, tan hospitalario, tan amigable y que ha ayudado a convertir estos desiertos en una tierra de trabajo y de progreso. Todos debemos unirnos para que no se nos siga desprestigiando porque no lo merecemos.