Con la enésima derrota que sufrió ayer el Santos, ahora ante Toluca, que empleó mucha gente joven y sin mucha experiencia, sigue reafirmándose la urgencia que existe de hacer una revisión total de lo que es la organización, incluyendo la parte técnica.
Porque, ¿qué ha logrado el nuevo cuerpo técnico que se supone estaría encargado de hacer reaccionar al equipo? Ojalá que ya les caiga el veinte a los señores que están junto a los escritorios. Hacen falta otro tipo de personas, de arriba a abajo.
Eso si quieren salvarse del descenso, pues de lo contrario, sigan repartiendo, ayudando a todos, imitando a los supermercados que nacieron en esta Comarca, que les gusta mucho repartir puntos entre su clientela. Santos no sólo es el más malo, sino el que no reacciona.
Hay que ver lo que dicen los encargados, tranquilos, conformes, esperanzados, mientras que la nave está peor que el Titanic, con mucho tiempo bajo el fondo del mar y en la que algunos todavía quieren viajar, queriendo olvidar que ya no es posible.
Ahora se dice que va gente a Sudamérica a buscar jugadores, y a esa noticia se agregarán otras similares, mientras que aquí, Atlante, Pachuca y Cruz Azul piensan en tres puntos que estarán a su disposición cuando ?jueguen? contra Santos.
No pasa nada, no pasa nada, dirán algunos queriendo ignorar la realidad, mientras siguen escribiéndose páginas tristes de algo que ya se dice es ?la historia de un descenso largamente anunciado?, aunque ojalá estén equivocados y un día empiece la reacción junto a los escritorios.