Aunque con angustia al final, Santos consiguió al fin su primera victoria del torneo, y la reacción que empezó desde las oficinas se extendió por fin a la cancha, y aunque los de la Comarca no dieron un gran partido sí hicieron lo suficiente para ganar.
Porque al fin aparecieron los goles, y éstos dieron principio con una jugada, como se dice en el medio, con mucho corazón y mucha entrega del lagunero Rafael Figueroa, siendo secundado por otro paisano, Oribe ?Cepillo? Peralta casi al final.
Y mientras, los refuerzos traídos últimamente siguieron sin mostrar méritos para quedarse. Rodrigo, que había estado por el centro en la primera parte, se multiplicó por los laterales en la complementaria, y dos servicios de él sirvieron para dos goles.
Santos parecía conseguir una victoria cómoda pero aparecieron los descuidos defensivos, y después de ir ganando por dos goles a cero en pocos minutos fueron emparejados por los Potros, que iban por más en bravía reacción.
Así, el gozo parecía irse al pozo, pero en gran jugada de Francisco Torres, culminada por Oribe Peralta, se escribió por fin la primera y anhelada victoria, que ojalá marque nuevos y mejores tiempos, después del gran respaldo que les dio su patrocinador.
Tendrán que hacerse más ajustes en las oficinas del Santos y sobre todo en la cancha. Al terminar el presente torneo debe haber una reestructuración total si se quieren salvar del descenso. Y habrá que analizar quiénes se van... pero volando.
