Es muy versátil, en postres, zumos y ensaladas, la manzana aporta multitud de beneficios para la salud.
AGENCIAS
MÉXICO, DF.- En la mitología ha sido causa de guerras entre dioses y humanos. Considerada como la fruta dorada, la manzana ha suscitado tentaciones en el paraíso y terribles disputas en el campo de batalla. Pero más allá de la literatura, los poderes del fruto se transforman en auténticos beneficios para la salud. La manzana es laxante, reconstituyente y antioxidante, tres características que la hacen óptima a cualquier hora del día.
Por otra parte, la manzana también es rica en pectina -que puede ayudar a controlar el nivel de colesterol y de azúcar en la sangre- y en celulosa, que contribuye al buen funcionamiento del intestino.
La manzana es el fruto de unos pequeños árboles, originarios de Europa, el oeste del Turkestán y el sudoeste y centro de Asia. Existen incontables variedades de manzanas por todo el mundo.
Gran fuente de vitamina C, contiene fibra, antioxidantes, guercetina, ácido elágico, ácido cafeico, potasio, fósforo, calcio, hierro, vitamina A, B1, B2, B6, vitamina e, ácido fólico y niacina.
La manzana tiene un bajo contenido de proteínas, grasas y sodio. Ayuda contra el estreñimiento por su fibra y ayuda contra la diarrea si se ralla y deja oxidar, al oxidarse la pectina se hace presente. Limpia los dientes al comerla a mordidas, así como fortalece las encías.
Las manzanas son ricas en flavonoides y polifenoles. Éstos fitoquímicos reducen el proceso natural de oxidación, que puede causar daños en los tejidos, cáncer, problemas cardiovasculares y cataratas.
Los flavonoides en las manzanas inhiben la formación de placas arteriales y coágulos, reduciendo los riesgos de enfermedades cardiovasculares.
El consumir diariamente 1 manzana ayuda al buen funcionamiento del pulmón en personas de edad, además tiene efectos favorables en la presión arterial, tiene grandes beneficios en personas con cataratas y un sin fin de beneficios más para la salud.