Destacan la eficiencia del programa Oportunidades
Agencias
México, DF.- México requiere una tasa anual de crecimiento económico adicional de 2.1 por ciento para lograr una efectiva reducción de la desigualdad social y así tener avances en la lucha contra la pobreza, señaló ayer el Banco Mundial en un informe. Aunque estos niveles de crecimiento se ubican entre los mayores de Latinoamérica, el organismo multilateral subrayó el impacto que en estos esfuerzos tienen programas de asistencia social, en especial al fortalecer la inversión en capital humano en las nuevas generaciones.
Entre estas iniciativas el Banco Mundial (BM) resaltó a Oportunidades (antes Progresa).
El reporte del BM, Reducción de la pobreza y crecimiento: Círculos virtuosos y círculos viciosos, indicó que México, como la mayoría de los países de Latinoamérica y el Caribe, requiere acompañar este crecimiento con una mejor distribución del ingreso.
Ello como condición para lograr avances sustantivos en el combate a la pobreza, consideró el organismo. Aunque México ha sido uno de los países de la región que han registrado favorables tasas de crecimiento, los niveles de pobreza continúan al alza, comentó.
Cifras de la institución mostraron que de 1992 a 2000, México registró un aumento de 0.9 por ciento en el nivel de pobreza extrema, aquellas personas que viven con menos de un dólar al día, mientras que la distribución de los ingresos mejoró apenas en 1.4 por ciento.
En 2003, la economía mexicana creció 1.4 por ciento, mejorando de manera notable el siguiente año cuando ésta se ubicó en cuatro por ciento, pero cayó a 3.1 por ciento durante 2005 y ahora se prevé que podría ubicarse en 3.6 por ciento en 2006. El ingreso per cápita registró una sustancial mejoría en las últimas cuatro décadas, al pasar de tres mil 976 dólares en 1960 a ocho mil 931 en 2000, a lo que se sumaron otros indicadores como la expectativa de vida que pasó de 58 a 73 años.
?Un suceso alentador reciente es la introducción de políticas exitosas tales como Progresa/Oportunidades en México?, resaltó el Banco Mundial en su reporte.
Oportunidades combina las transferencias fiscales a los pobres con incentivos para la creación de capital humano, a través de dar recursos económicos a familias pobres a cambio de enviar a sus hijos en la escuela y aprovechar las redes públicas de asistencia social.
Para el BM programas como éste resultan de enorme beneficio porque ?contribuyen de inmediato a reducir la iniquidad y la pobreza a través del componente de la asistencia económica?. ?Y a reducir la pobreza en el largo plazo, mediante la inversión acumulada en capital humano?, agregó.
Una evaluación previa del Banco Mundial sobre este programa mostró un aumento en las tasas de escolarización y de los años de escolaridad entre las familias pobres, gracias a ello el Gobierno mexicano optó por ampliar este programa.
Desempleo
En el cuarto trimestre de 2005, la Población Económica Activa (PEA) de México fue de 43.9 millones de personas, de las cuales poco más de 42.5 millones estuvieron ocupadas y 1.4 millón desocupadas.
El Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática(INEGI) señala que según estos datos, la población ocupada en el periodo octubre-diciembre del año pasado representó el 96.9 por ciento, en tanto que la desocupada el 3.1 por ciento de la PEA.
En el cuarto trimestre de 2005, la población subocupada (que declaró tener necesidad y disponibilidad para ofertar más horas de trabajo que las que su ocupación actual le permite) se ubicó en 2.7 millones de personas, es decir, 6.1 por ciento de la PEA y 6.3 por ciento de la población ocupada.
Los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), refiere que los datos muestran que la población ocupada en el sector informal alcanzó en el periodo de análisis 12.2 millones de personas, que representan el 28.7 por ciento de la población ocupada.