Tiene el presidente Chirac nueve días para promulgar la Ley.
EL PAÍS
PARÍS, FRANCIA.- El Consejo Constitucional francés validó ?sin reservas? la Ley sobre la igualdad de oportunidades que, en su Artículo Ocho incluye el polémico Contrato Primer Empleo (CPE), que permite el despido sin justificar de los menores de 26 años en los primeros 24 meses.
El presidente Jacques Chirac, que tiene nueve días para promulgarla, quien anunció ayer que se dirigirá a los franceses por televisión posteriormente.
El primer secretario del Partido Socialista (PS) Francois Hollande, que había presentado el recurso contra el CPE, advirtió a Chirac que se expone a ?una prueba de fuerza? si la promulga.
En un ambiente de tensión, salpicado por incidentes protagonizados por grupos de jóvenes, la intriga sobre la decisión del alto Tribunal se alargó durante toda la jornada. No fue hasta pasadas las 19:30 horas cuando hizo pública la decisión en el sentido de que no hay inconstitucional en los dos puntos claves del CPE, la duración del periodo de prueba y la posibilidad del despido no justificado.
El Consejo optó por la línea más ortodoxa y evitó crear jurisprudencia que pueda interferir en cualquier intento futuro de reforma laboral. El dictamen considera que el hecho de que el CPE afecte sólo a los menores de 26 años no rompe la igualdad entre jóvenes porque ?ninguna regla de valor constitucional prohíbe al legislador tomar medidas en favor del empleo de los jóvenes?.
En cuanto al despido injustificado, el alto Tribunal considera que el trabajador despedido sigue teniendo derecho a recurrir ante los tribunales.
?El juez verificará especialmente que el motivo de la ruptura no es discriminatoria y no atenta contra la protección prevista por el código de trabajo para las mujeres embarazadas, los accidentados en el trabajo y los asalariados protegidos?, señala el dictamen.
El presidente Chirac tratará de revelar cuál será su salida de la crisis ya de casi dos meses que degeneró en una protesta social que sacó repetidas veces a millones de personas a la calle.
La noticia clave de ayer, que señalaba un importante cambio en la percepción de las luchas internas que esta crisis ha generado dentro de la derecha gobernante, la publicó el periódico Le Parisien. El primer ministro Dominique de Villepin, según este rotativo, habría amenazado al jefe del Estado con presentar su dimisión si éste retiraba, suspendía o desnaturalizaba su reforma laboral.
Colapsan estudiantes el tráfico
Las órdenes del ministro de Educación, Gilles de Robien, a los directores de institutos de secundaria de intentar romper el bloqueo que sufren una buena parte de los centros, derivó ayer en una ristra de incidentes de todo tipo -especialmente cortes de carreteras y paralización de estaciones- para desesperación de automovilistas y viajeros.
El movimiento estudiantil cifra en torno a mil 400 el número de institutos bloqueados de los cuatro mil 330 que hay en Francia. Según el Ministerio, ayer al mediodía había 176 institutos bloqueados, un cuatro por ciento del total. Los intentos de algunos directores de centros por reanudar las clases fracasaron.
En París, más de un millar de estudiantes, que rondaba primero la sede del Consejo Constitucional a la espera de su decisión y que luego se reagrupó en la céntrica plaza de Chatelet, consiguieron desbordar las barreras de la Policía que bloqueaban la entrada a la Estación de Lyon, penetrar en el interior, invadir las vías e interrumpir el tráfico ferroviario.
También en la capital, un centenar de jóvenes entre los que se encontraba Karl Stoeckel, presidente de la Unión Nacional de Liceos (UNL) y uno de los líderes del movimiento anti-CPE bloquearon el Periférico, la principal vía de circunvalación de París, generando grandes congestionamientos.
Varios estudiantes, entre ellos Stoeckel, fueron detenidos.
