EFE
SYDNEY, AUSTRALIA.- La actriz australiana Nicole Kidman visitó ayer el Hospital Infantil de Sydney junto a su madre, Janelle Kidman, y de sus dos hijos, recién llegados al país para acompañarla en su boda prevista para este fin de semana.
Isabella, de 13 años, y Connor, de 11, viajaron en un avión privado desde Tokio donde acompañaban a su padre, Tom Cruise, en un viaje publicitario, informaron medios noticiosos locales. Cruise y Kidman se divorciaron en el 2001.
Ambos fueron trasladados a la lujosa mansión sobre la bahía de Sydney que Kidman y Cruise compartieron en otros tiempos, acompañados de su abuela Janelle, y poco después volvieron a salir con Kidman para visitar el Hospital del Niño, de Sydney.
Estuvieron dos horas, durante las cuales visitaron los departamentos de oncología, hematología y neurología, hablaron con los pacientes y funcionarios.
A su salida del hospital fueron rodeados por los fotógrafos, cámaras de televisión y aficionados que pugnaban por tener el mejor ángulo, bloqueando una de las salida en un momento. ?Tengan cuidado de no causar peligro?, recomendó la actriz, de 39 años.
Elizabeth Crundall, directora ejecutiva de la Fundación del Hospital del Niño de Sydney, dijo que le había sorprendido la visita de Kidman y fue calificada de ?impresionante, extraordinaria y maravillosa? por la directiva, quien se sorprendió de que la actriz encontrara unos momentos en su agenda para visitar el centro.
?De haber tomado tiempo antes de su propia boda, por un par de horas fue sorprendente, extraordinario y maravilloso?, comentó. Se informó que Kidman había pedido a sus invitados que hicieran donaciones de caridad en vez de traerle regalos de boda. Ella y Urban, de 38 años, un astro de la música country de Nashville, Tenessee, tienen previsto casarse en una suntuosa ceremonia el domingo en la noche.
Los preparativos continuaban ayer al construirse una marquesina en la iglesia católica de estilo gótico en Manly, un suburbio playero donde al parecer se realizará la boda.
Según los medios australianos, la actriz se casará el domingo en la capilla católica Cardenal Cerretti, con su hermana Antonia y su prima Angela como damas de honor en la ceremonia que será oficiada por el padre Paul Coleman.
La boda contará con otras estrellas de invitados, como Naomi Watts, Russel Crowe o Hugh Jackman, o el empresario de los medios de comunicación Rupert Murdoch, entre otros.
Keith es mucho menos conocido en Australia que la protagonista de Las Horas, por la que ganó el Oscar a la Mejor Actriz en 2003, pese a ser uno de los cantantes ?country? más famosos de Estados Unidos, donde vive desde 1992.
Con su primera guitarra a los seis años, su abandono de la escuela a 15 y su primer contrato firmado con la discográfica EMI siete años después, Urban sólo parecía tener en común con Kidman sus orígenes australianos.
Y fue precisamente Australia lo que les unió en enero de 2005, cuando ambos asistieron a una cena en Los Ángeles patrocinada por el gobierno australiano. Con varias relaciones importantes en los últimos años que no cuajaron en boda -como las mantenidas con el productor Steve Bing y el cantante Leny Kravitz-, muchos dudaban del final feliz de la nueva historia de la actriz.
Ahora, la principal incógnita es su vestido de novia, visto que hasta se conoce dónde pasará la luna de miel: en la exclusiva isla de Wakaya, en las Fiyi, donde ya pasó unas vacaciones con su anterior marido.
Después, la pareja volverá a la ciudad de Nashville (Tennessee), donde vive el cantante y a la que recientemente se mudó Nicole, con una nueva ?misión?: sobrevivir a las especulaciones de la prensa sobre cuándo tendrán el primer hijo.
