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México, DF.- La construcción de vivienda de madera es una alternativa para abatir el rezago habitacional de México, ante su potencial de desarrollo que podría alcanzar el 40 por ciento de las familias que registran ingresos de uno a tres salarios mínimos.
Así lo señaló la directora general de Fomento al Crecimiento de la Comisión Nacional de Fomento a la Vivienda (Conafovi), Evangelina Hirata, quien resaltó que el impulso a este segmento permitiría atender las necesidades de los más necesitados.
Durante la presentación del Segundo Concurso de Vivienda de Madera en México, reconoció que en el país aún no existe esta industria como tal, ni los desarrolladores para crear viviendas de madera.
Por ello, el reto es impulsar este segmento del que ya se tienen experiencias en el territorio mexicano, trabajar de manera conjunta con los estados en la normatividad y promover el crédito hipotecario.
En conferencia de prensa, agregó que se requiere un Programa Nacional de Vivienda de Madera e introducir este tipo de unidades, así como el sistema mixto (madera y concreto) dentro de la vivienda económica, a fin de atender las necesidades de los que menos tienen.
Subrayó, que el 40 por ciento de las necesidades de vivienda se ubican en familias que registran ingresos de entre uno a tres salarios mínimos, los cuales podrían ser un mercado potencial para estas unidades.
Recordó que la meta de vivienda para este año, es otorgar 750 mil unidades y mantener ese ritmo, incluso superarlo, el rezago habitacional podría abatirse en los próximos 20 años, por lo que la inclusión de vivienda de madera sería una opción más.
El coordinador general de Producción y productividad de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), Carlos González Vicente, dijo que en el país ya se cuenta con la infraestructura para desarrollar este segmento, porque aprovecha las estructuras que ya existen.
Sin embargo, consideró que se requiere hacer atractiva esta opción entre la población, los desarrolladores, las instituciones financieras, y así poder crearlas e impulsarlas en la autoconstrucción, y generar los servicios públicos necesarios.
Resaltó que comparado con la vivienda tradicional, las casas de madera tienen un costo de entre 20 y 30 por ciento menos, además que los tiempos de entrega se reduce de seis o siete meses, a 90 días.
Coincidió en que incorporar esta alternativa reduciría el tiempo para cubrir el rezago habitacional, porque se tendrían más opciones de construcción y confió en que de impulsarse las ventajas podrían observarse en unos cinco o diez años.
El presidente del Consejo Nacional de Madera, Jaime Martínez Negrete, añadió que para que las instituciones financieras otorguen créditos para la construcción de estas casas, piden una garantía de 30 años, lo cual se pretende demostrar en el concurso.
La segunda edición del mismo, tiene como objetivo promover el desarrollo de vivienda económica mixta y de madera, así como demostrar las ventajas de la tecnología del tratamiento de este material.
Agregó, que está dirigido a instituciones de educación superior, profesionistas, empresas desarrolladoras, promotoras de vivienda, constructores, entre otros.
La convocatoria inició el 26 de abril pasado, y las bases para el certamen pueden consultarse en la página de Internet www.conafor.gob.mx a partir de este viernes, mientras que el fallo se dará a conocer el ocho de septiembre de este año.
