El Siglo de Durango
SÚCHIL, DGO.- El campesino de estos tiempos vota con la esperanza de tener un gobierno que ponga su mirada en las necesidades del medio rural y que además cumpla sus promesas de campaña, expresó Rafael Salazar González.
Dijo que toda su vida se ha dedicado a las actividades del campo y desde que tiene la edad suficiente ha hecho valer su derecho al sufragio, sin perder la fe en que algún Gobierno por fin preste la atención que requiere el sector agropecuario, en especial del desprotegido sector social.
Comentó que han sido muchas las promesas que ha escuchado a lo largo de 50 años, pero el campesinado nunca ha dejado de sufrir carencias, desencantos y abusos por parte del sistema y productores poderosos, que solamente les dejan el recurso necesario para subsistir.
Preocupado, Rafael manifestó que espera que si se llega a presentar un cambio de Gobierno los apoyos que hay, aunque sean escasos, no dejen de llegar, evidenciando que en la actualidad es beneficiario del Programa de Apoyos Directos al Campo (Procampo).
Mencionó que ése es el temor que embarga a la mayoría de los ejidatarios de Súchil, pues aunque no es mucha la ayuda que reciben, en más de una ocasión los ha sacado de apuros, por lo que les inquieta la duda de recibir recursos económicos federales.
No obstante, señaló que como ciudadano mexicano tiene que creer y elegir a sus gobernantes, pues aunque la situación sea adversa puede cambiar con la participación de la ciudadanía y el buen desempeño de los dirigentes.
?Las cosas han cambiado mucho, ya no estamos en los tiempos de nuestros padres, cuando el voto era unilateral, aunque aún hay quienes quieran influir, la mayoría de los campesinos votan por quienes ellos quieren?, comentó Salazar González.
Platicó que está preocupado porque algunas de las 12 vacas que tiene muestran los síntomas de una enfermedad de los ojos, por lo que se encuentra en busca de medicamentos y de un veterinario que no cobre caros sus servicios.
Por otra parte, señaló que el forraje es muy caro, incluso el que distribuye la Asociación Ganadera, pues mientras que en los establecimientos se consigue a dos pesos el kilogramo de maíz molido, en la organización venden la misma unidad en 1.9 pesos.
Es entonces cuando hay reacción y se trata de buscar un Gobierno que realmente apoye al agro y no personas que se sigan sirviendo de los campesinos para enriquecerse, concluyó.
Numeralia
centavo
menos cuesta el maíz molido subsidiado que el que venden en las tiendas del municipio
fotofrase
Cambio
?Las cosas han cambiado mucho, ya no estamos en los tiempos de nuestros padres, cuando el voto era unilateral, aunque aún hay quienes quieran influir, la mayoría de los campesinos votan por quienes ellos quieren?
Rafael Salazar González, campesino