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BOGOTÁ, COLOMBIA.- El proceso de paz con los paramilitares colombianos volvió a la calma después de días de tensión causada por una resolución de la Corte Constitucional que rechazó parte de los beneficios que les habían ofrecido por su desmovilización.
La Corte Constitucional (CC) enmendó algunos componentes de la Ley de Justicia y Paz que norma el proceso de desactivación de los líderes de esos grupos de ultra derecha, pero la resolución fue insuficientemente explicada y malinterpretada.
Al explicar las modificaciones, la Corte inicialmente pareció sugerir que aquellos paramilitares convictos en ausencia antes de que el proceso de paz se iniciara en 2003, debían cumplir esas sentencias completas, lo que hubiera representado décadas de cárcel para algunos comandantes que consideraron el hecho como el fin del proceso.
?La situación realmente se tornó crítica, pero personalmente he aclarado a los paramilitares que el proceso de paz continuará?, declaró el ministro de Interior y Justicia, Sabas Pretelt.
Los paramilitares fueron creados en 1980 por hacendados que quería protegerse del asedio de las guerrillas izquierdistas. Desde que inició el proceso de paz unos 30 mil se han desmovilizado, lo que incidió en que bajara la violencia en el país.
Entre otros cambios, la Corte rechazó una cláusula que permitía a los paramilitares deducir los más de dos años que han pasado negociando de sus sentencias finales, que en la Ley se estipula no superarán los ocho años.
También corrigió que las penas deben cumplirse en prisiones establecidas formalmente y no en granjas u otros sitios como la Ley pretendía.
La Corte también decidió que los comandantes paramilitares deben entregar todos los bienes que poseen, adquiridos ilegal o legalmente, para resarcir a las víctimas de la violencia que ocasionaron.
