Madrid, (EFE).- Una colección inédita de doscientas piezas de cerámica, así como textiles y joyas muestra en el Museo de América de Madrid a los incas como pueblo aglutinador de los logros de sus antepasados y protagonista de la cultura más desarrollada de Sudamérica.
Bajo el título "Y llegaron los incas. Unidad en la diversidad", la exposición pretende dar a conocer diversas obras con el fin de articular la historia del Perú prehispánico partiendo de la unidad, diversidad y continuidad de la cultura andina.
Así lo explicaron las comisarias de la muestra, María Jesús Jiménez y Ana Verde, quienes precisaron que "la colección está dividida en períodos históricos desde la considerada cultura madre, la Chavin, hasta la llegada de los incas".
Todo ello sin olvidar otras culturas menos conocidas, aunque no por ello menos importantes, como la Cupisnique, Tihauanaco o Huari, junto a las descubiertas más recientemente como la Chiribaya y la Sihuas (asentada en la actual Arequipa).
Además de piezas de cerámica se dan a conocer al público textiles, arte plumario, armas, orfebrería de oro y plata e instrumentos de metal y madera como hachas, que permiten observar la evolución de estas culturas, tanto en la costa como en la sierra de Perú.
Las comisarias destacaron "las costumbres similares que tuvieron estos pueblos en cuanto a la agricultura, la guerra y las prácticas religiosas distinguiéndose por otras opciones culturales propias" y surgiendo así "la unidad en la diversidad".
Así, en la iconografía representada en las cerámicas de las culturas Chavin y Cupisnique se muestran símbolos religiosos como el jaguar, la serpiente, el cóndor o el halcón, muchos de los cuales se mantienen hasta la llegada de los incas.
Como ejemplo de ello destacan una vasija de piedra de la época Chavín, que se desarrolló entre el 1200 al 200 antes de Cristo, que refleja los mitos y ritos de esta cultura, así como una máscara de la época Cupisnique.
Posteriormente, la culturas Moche, Nazca, Shihuas, Recuay y Tihauanaco introducen nuevos elementos religiosos y culto que quedan reflejados en la muestra que aporta valiosos objetos de adorno personal, cerámicas y textiles.
La mayoría de los objetos son fondos pertenecientes al Museo de América de Madrid, aunque un pequeño porcentaje ha sido aportado por el Museo Etnológico de Berlín, el de Prehistoria de la ciudad española de Valencia y el de Antropología de la capital española.
La exposición se completa con una serie de talleres en los que durante los fines de semana se podrá trabajar la cerámicas y decoraciones de tejidos de las cultura de Perú representadas en la colección.