Pueblo Nuevo es el municipio que más aporta madera en el estado, aunque su industria trabaja al 40 por ciento de su capacidad.
Un siglo de explotación maderable y la pobreza persiste en la zona serrana de Durango; ¿quienes se han beneficiado?
PUEBLO NUEVO, DGO.- Corrupción y voracidad, aunados a la ignorancia, son factores bien aprovechados por los taladores en el exterminio del bosque de Durango con la complicidad de los funcionarios federales y estatales. Más de un siglo de explotación maderable y pobreza extrema.
Después de un sondeo en 388 personas, desde modestos ciudadanos hasta especialistas en materia forestal revelan que la putrefacción de funcionarios y su desmedido apetito por el dinero se han sobrepuesto a la razón, expresó José Luis Montes Casas.
Armando Flores Ramírez comenta: “La Sierra de Durango sólo beneficia a algunos industriales, con toda la complicidad de los últimos cinco sexenios de Gobierno del Estado”.
Para Liborio López Covarrubias es conveniente dejar de explotar el bosque y buscar otras alternativas de empleo, para la gente que aún vive en las zonas boscosas, “ya que los afectados con la tala somos todos y los beneficiarios unos cuantos que se hacen llamar empresarios, pero actúan como depredadores del bosque”.
A pregunta expresa de El Siglo de Durango: ¿Consideras que el aprovechamiento del bosque en el estado de Durango se refleja en su desarrollo y progreso?, la respuesta en un 86.6 por ciento de los participantes en el sondeo fue un contundente no, por la tala inmoderada y la pobreza existente en el medio rural. Como Armando Flores Ramírez, muchos opinan que eso ha sido muy notorio en los últimos cinco sexenios desde Héctor Mayagoitia Domínguez, Armando del Castillo Franco, José Ramírez Gamero, Maximiliano Silerio Esparza y Ángel Sergio Guerrero Mier.
Aunque el problema, según Francisco Compeán, es que la gente de la Sierra sigue estando pobre después de casi un siglo de aprovechamiento del bosque de Durango.
Gerardo Álvarez afirma: “Los anteriores gobiernos se han encargado de sumir en la pobreza al estado, obligando a miles de duranguenses a abandonar su tierra por falta de oportunidades, buscando siempre el beneficio personal y de partido.
Hay quienes muestran algunas diferencias, aunque éstas fueron mínimas; afirmaron que la explotación del bosque genera industria y fuentes de empleo. En total fue un 10.3 por ciento de los encuestados.
El porcentaje del 86.6 por ciento sobre la tala inmoderada y pobreza rural no puede estar tan arriba debido a que no se analiza la pregunta, que a pesar de todo el desarrollo del estado se refleja por la explotación de los bosques, generando industrias que mantienen fuentes de empleo para toda la entidad.
Si a estas industrias se les exige que por cada árbol talado deben plantar diez, tal vez el bosque se repondría; a la vez, ésta sería una fuente de empleo sustentable para las comunidades adyacentes a los bosques, expresaron Luis Favela y Flavio N.
No sólo del bosque se puede conseguir el desarrollo ya que la agricultura y ganadería, así como el comercio, proporcionan grandes fuentes de trabajo, añade.
Por su parte, Abelardo N. considera que el aprovechamiento del bosque en México siempre ha sido para los grandes capitalistas y políticos corruptos; nunca se ha beneficiado a sus verdaderos dueños.
Luis Fernandez señala: “Necesitamos más reforestación e inversión por parte de los tres órdenes de Gobierno y medidas más estrictas a la tala inmoderada.
Otros sin dar su nombre opinan, como Paulino Córdova Quiñones, titular de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), al asegurar una y otra vez que en Durango no hay tala, a pesar de las denuncias públicas y ante los tribunales por el clandestinaje de madera.
Paulín Ponce Pérez expresa: “A la larga se afectará gravemente la calidad de vida en Durango, con la tala inmoderada, además de Sinaloa, Chihuahua y Coahuila que se benefician con el agua que producen nuestros bosques”.
Daniel Pacheco declaró: “La modernización sólo nos esta llevando a terminar con nuestro ecosistema, la prioridad debe ser conservar la nuturaleza, de cualquier manera existen gran variedad de materiales nuevos, para elaborar lo que se hace con la madera. La madera es un recurso renovable, pero a muy largo plazo, indica.
Jorge Sicsik Arévalo señala: “La falta de conciencia de los funcionarios que por llenarse los bolsillos de dinero se olvidan del impacto negativo al medio ambiente con la tala de los bosques, es difícil, parece hasta imposible acabar con esta situación, pero no imposible”.
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Se agotan volúmenes
Durango cuenta con cuatro millones 989 mil 401 hectáreas de bosque maderable y en los últimos años líderes forestales admiten que los volúmes se estan agotando, lo cual refleja la disparidad en el corte con el cultivo, la gente se interesa en cortar, pocos son los que cultivan.
En Pueblo Nuevo hoy la explotación maderera está a cargo de los 27 ejidos, de los cuales 20 están afiliados a la Unión de Ejidos y Comunidades Forestales, donde también participan productores rurales y una sociedad de microindustriales.
La supervisión de Profepa relacionada con el manejo de los bosques es de dudosa honestidad, de acuerdo con las denuncias de los productores afectados, pues hay grupos amafiados con estas dependencias como en Piélagos, donde las disputas por la tierra y madera han generado odio y muerte .
La capacitación de técnicos forestales y el apoyo del Gobierno del Estado y de las comunidades ejidatarias han contribuido a fortalecer los programas de reforestación, pero no en la medida requerida.
Tan deficiente es la supervisión de Profepa como el combate a los incendios forestales, después del principal depredador que es el hombre le siguen los siniestros naturales y provocados por manos criminales y sin conciencia.
Analistas y productores de Pueblo Nuevo como de Santiago Papasquiaro saben que los recursos de la madera se acaban y que el futuro no espera. Hay una gran necesidad de buscar nuevas opciones. Los proyectos que proponen generar empleos fuera del bosque son varios, pero el tiempo se agota y los habitantes de El Salto tendrán una vez más que afrontar su destino.
Actualmente la industria forestal de Pueblo Nuevo, con más de 200 industrias, opera al 40 por ciento de su capacidad, el desempleo se observa con más frecuencia desde hace cinco años por la emigración de jóvenes y familia a otras ciudades en busca de otras oportunidades.
Cabe señalar que Pueblo Nuevo es el municipio que más aporta madera a la industria, aunque no en la misma capacidad, pues cada año se agotan los volúmenes, dicho por los mismos posesionarios del bosque.
Antecedentes
Son muchos los riesgos por la tala inmoderada en el estado de Durango; urge buscar nuevas opciones para dar descanso a los bosques.
-La industria forestal atraviesa por mal momento; su recuperación se avizora a largo plazo.
-En la medida que se explota el bosque se perderá inevitablemente la reserva forestal de México.
-Debido a la competencia de otros países y lo costoso de la extracción de mandera en Durango, el sector forestal maderable va en camino a la crisis por la incosteabilidad.
-Según la Semarnat, la producción forestal en Durango cayó 40 por ciento en los últimos siete años.
-En 2000 los volúmenes de extracción forestal ascendían a más de 3.5 millones de metros cúbicos (m3) de madera en rollo, mientras que en la actualidad oscilan entre 2.2 y 2.5 millones de m3 de madera.
-De 39 municipios del estado 18 tienen actividad forestal, pero seis concentran el 80 por ciento de la producción forestal en el territorio duranguense.
- En cinco años o un poco más, el estado de Durango podría perder su estatus de primer reserva forestal de México.
-Dentro de cinco años o poco más, las reservas forestales de los estados del Sureste de la República Mexicana serán mejores que las de Durango.
- El programa Cero Tolerancia contra la tala clandestina de madera en Durango se aplica más con fines preventivos que reactivos, según Profepa.
- Juan Rentería Ánima, del INIFAP en el estado, reconoció que el rezago en estos sectores primarios es de muchos años atrás.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango y Archivo.
Aportación
Los municipios que más aportan madera a la industria forestal, con base en el reporte de 2006, son los siguientes:
Municipio Lugar Volumen (m3)
Pueblo Nuevo 1º. 619,000
San Dimas 2º. 445,000
Guanaceví 3º. 340,000
Tepehuanes 4º. 234,000
Durango 5º. 230,000
Santiago Papasquiaro 6º. 148,000
FUENTE: Semarnat.
