Las dos variables macroeconómicas en México se encuentran estables, sin embargo, prevén cambios para el próximo año resultado de la Reforma Fiscal.
MÉXICO, DF.- La economía mexicana creció cuatro por ciento en el tercer trimestre además de registrar cifras récord de creación de empleos, informó ayer la Secretaría de Hacienda.
“Se estima que durante el tercer trimestre el valor real del PIB (Producto Interno Bruto) haya crecido a una tasa anual cercana a cuatro por ciento, lo cual implicaría que la economía se haya incrementado a un ritmo trimestral de alrededor de 1.5 por ciento”, explicó en rueda de prensa Miguel Messmacher, titular de la Unidad de Planeación Económica de Hacienda.
Además Hacienda mantuvo en tres por ciento su pronóstico de crecimiento de la economía mexicana para el cierre de 2007, ante el riesgo de una mayor desaceleración económica en Estados Unidos.
Entre los factores que han influido en el dinamismo de la economía están el crecimiento del sector agropecuario (8.4 por ciento de enero a septiembre), además de que “el valor real de la producción industrial se elevó a una tasa anual de 2.4 por ciento”, añadió el funcionario.
De igual forma, “la oferta real de servicios se elevó a un ritmo anual de 5.3 por ciento”.
Adicionalmente, durante septiembre pasado se contabilizaron 14.7 millones de personas afiliadas a la seguridad social con empleo, “lo cual implicó un crecimiento trimestral de 283,601” plazas laborales, dijo Messmacher.
“En lo primeros nueve meses del año se acumularon cerca de 754,000 nuevos empleos”, comentó.
A su vez, durante el tercer trimestre del año el balance público acumuló un superávit de 138,206 millones de pesos (12,564 millones de dólares), cifra menor a la observada en el mismo periodo de 2006, según el informe de la situación económica del país que Hacienda elabora cada tres meses.
A setiembre, el superávit primario ascendió a 318,709 millones de pesos (28,973 millones de dólares), mientras que los ingresos presupuestarios del sector público se ubicaron en 1.7 billones de pesos (unos 150,000 millones de dólares), monto mayor en 2.4 por ciento en comparación con el periodo de enero a septiembre de 2006.
En cuanto a la deuda neta del Gobierno Federal, su saldo se ubicó en 2.03 billones de pesos (unos 185,000 millones de dólares), de los cuales 78 por ciento es deuda interna y el 22 por ciento deuda externa.
Como porcentaje del PIB, la deuda del gobierno federal mexicano se ubicó en 21.1 por ciento, cifra similar a la observada al cierre de 2006, correspondiendo 16.5% del PIB a la deuda interna y 4.6 por ciento del PIB a la deuda externa.
Expuso, que a diferencia de desaceleraciones pasadas en Estados Unidos, si esta llega a materializarse no estaría conducida por la producción industrial sino por el sector de construcción, dada la actual crisis en el sector hipotecario por los créditos de alto riesgo.
Así, en la medida en que el sector de producción industrial se mantenga con un desempeño favorable en Estados Unidos, habría un menor efecto por el lado de la producción industrial en nuestro país, señaló Messmacher Linartas.
Un segundo elemento es el hecho de que, aunque Estados Unidos sigue siendo el principal socio comercial de México, en los últimos tres años se ha empezado a dar una diversificación en el destino de las exportaciones mexicanas.
Expuso que hace seis años 90 por ciento de las exportaciones mexicanas iban hacia Estados Unidos, pero ahora se ha reducido a casi 80 por ciento, mientras las exportaciones a Europa y al resto de los países de Latinoamérica están creciendo a tasas cercanas al 30 por ciento anual.
Además, se está observando una recuperación muy importante por el lado de la demanda interna en México que se mantendrá hasta el año próximo, así como una recuperación importante del empleo, de los salarios reales, y del crédito.
“Entonces realmente nosotros estamos anticipando que los efectos que pudiera tener un peor escenario en los EU, vayan a ser menores que en ocasiones pasadas, si bien ese sigue siendo el riesgo más importante desde el punto de vista de actividad económica”, afirmó.
Por su parte, el titular de la Unidad de Política y Control Presupuestario de la SHCP, Guillermo Bernal Miranda, confirmó que se otorgará el tradicional bono de fin de año a los burócratas, el cual ascenderá a siete mil 350 pesos en vales de despensa.
“Tradicionalmente los trabajadores operativos reciben una cantidad desde hace muchos años en vales de despensa hacia fin de año, esta cantidad se viene presupuestando regularmente cada año y se va a dar como todos los años”, informó.
Presiones para 2008
El Banco de México anunció ayer que prevé mayores presiones en los precios en 2008 por factores internos y externos del país, y que el próximo año cierre con una inflación entre el 3.75 por ciento y el 4.25 por ciento.
Para 2009 el banco central confía en que bajen las presiones en los precios en el país y que la inflación anual general termine entre el tres por ciento y el 3.5 por ciento, indicó en su Informe sobre Inflación la entidad, cifra que se ubica dentro de la meta del tres por ciento con variación de un punto porcentual a la baja o al alza.
La entidad presentó hoy su informe sobre precios de junio a septiembre donde señaló que el Producto Interior Bruto (PIB) cerrará este año en el 3.2 por ciento y entre un 3.25 por ciento y el 3.75 por ciento en 2008.
Para el próximo año el banco central pronosticó una generación de empleos de 700 mil personas, según las afiliaciones a la Seguridad Social, en tanto que el déficit por cuenta corriente crecerá del uno por ciento en 2007 al 1.2 por ciento.
Según el banco central en los nueve primeros meses de 2007 hubo "perturbaciones de oferta" que provocaron un repunte en la inflación general y en la subyacente.
En esta situación influyeron "los fuertes incrementos de las cotizaciones internacionales de los granos y de los lácteos", que han dejado perturbaciones "persistentes y de magnitud considerable" en México.
Entre las alzas más importantes del año destacó la del precio del maíz y de la tortilla, un producto básico elaborado con ese grano, imprescindible en la dieta de millones de mexicanos.
Sobre la recientemente aprobada reforma fiscal, que el año que viene introduce nuevos impuestos para empresarios y para la gasolina a partir de enero, el emisor advirtió que es previsible que "algunas empresas intenten trasladar al consumidor el costo asociado" con ella
