EL UNIVERSAL
MÉXICO, DF.- El presidente Felipe Calderón acordó mantener y renovar un “pacto político” con el PRI y sus gobernadores y grupos parlamentarios y de entrada, ofreció no intervenir en los procesos electorales y suspender la designación de nuevos delegados federales en el país.
En reunión privada, la cúpula priista encabezada por su dirigente nacional, Beatriz Paredes Rangel, los 17 gobernadores y los coordinadores parlamentarios en la Cámara de Diputados y el Senado de la República, reclamó a Calderón la falta de reciprocidad debido a que el priismo había logrado la gobernabilidad para la Administración calderonista y a cambio recibía ataques y agresiones.
En el encuentro privado, de acuerdo con fuentes del PRI, participaron como oradores Beatriz Paredes, el gobernador de Chihuahua, Reyes Baeza, el coodinador de los senadores del PRI, Manlio Fabio Beltrones y el coordinador de los diputados Emilio Gamboa.
Las fuentes consultadas informaron que luego del reclamo, Felipe Calderón manifestó su disposición para mantener el acuerdo con el PRI y concretar reformas legislativas en el Congreso de la Unión.
Los reclamos priistas incluyeron la actuación del PAN en los diferentes estados de la República, ya que, a decir de los gobernadores, en las entidades los panistas se convierten en grupos beligerantes contra los gobiernos estatales, mientras a nivel nacional el PRI mantiene una posición institucional.
Calderón dijo que haría lo posible para que el ambiente político en las entidades no se convierta en un conflicto.