La gravilla suelta en los trabajos de pavimentación de la carretera Torreón-San Pedro ha dejado daños en sus parabrisas a decenas de vehículos.
Han quebrado parabrisas a decenas de vehículos; afectados no saben quién les reparará los daños
TORREÓN, COAH.- A decenas de vehículos se les han quebrado los parabrisas, debido a la gran cantidad de gravilla suelta dejada en el área donde se realizan los trabajos de pavimentación de la carretera Torreón-San Pedro y que comenzaron hace alrededor de un mes.
Vecinos de La Concha, Albia, Hormiguero, Escuadrón 2001, así como conductores que utilizan esa rúa federal para trasladarse entre Torreón-San Pedro y Francisco I Madero, se quejaron de los daños que sufrieron sus vehículos y sobre los cuales no tienen quién les responda.
Hace aproximadamente cuatro semanas, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes inició trabajos de repavimentación en la carretera federal Torreón San Pedro, desde la Universidad Iberoamericana rumbo a Francisco I Madero Coahuila.
De acuerdo con vecinos de La Concha, empleados de una empresa constructora empezaron a colocar pavimento nuevo sobre la “carretera viejita”, pero no lo aplanaron lo suficiente de manera que la capa de asfalto quedó desmoronada y la gravilla se podía retirar hasta con el zapato”, aseguró Loruama Mancha.
Para habitantes de esa comunidad rural como Abundio Rocha y Óscar González Leija, quienes sufrieron daños en los vidrios de sus camionetas, “los trabajos de pavimentación están mal hechos porque el asfalto quedó poroso y disparejo, de manera que al paso de los carros y camiones pesados se levanta y las piedras se proyectan contra otros vehículos”, aseguraron.
Otras personas que también han sufrido daños en sus vehículos como Roxana Pérez, Rubén Muñoz y Juan Francisco Bautista, aseguraron que “son muchos los dueños de camionetas que sufrieron los mismos problemas pero no se han quejado porque no saben dónde. Cómo es carretera federal, no encuentran a quién hacerle cargos para la reposición de sus vidrios”.
Por los efectos de la gravilla suelta, los parabrisas se quiebran casi sin percibirlo. “De repente se les forman como chispitas, como pequeñas estrellas que son los efectos de las piedras de la gravilla suelta cuando se estrella contra los vidrios”, según el propietario del negocio de comida Los Ilegales al mostrar su camioneta Ford.
Él aseguró que además de la situación que prevalece en el ejido La Concha, el problema se ha agudizado entre Albia y la comunidad de Hormiguero.
Aseguró que los empleados de la constructora encargada de los trabajos tampoco tienen cuidado en la colocación de señalamientos preventivos.
Precisamente por el asfalto suelto, este tramo se ha vuelto peligroso en las noches.
