El líder de la CCI, Jaime Soto Escobedo, indicó que se quejan los campesinos de ser extorsionados por los funcionarios con una aportación obligatoria o “moche” por cinco mil pesos para acceder a un tractor subsidiado.
El Siglo de Durango
Corrupción, atrasos e irregularidades diversas padecen los campesinos al intentar acceder a los programas y recursos oficiales de apoyo al campo, aseguró la dirigencia de la Central Campesina Independiente (CCI).
La CCI denunció que a esta agrupación han llegado innumerables denuncias contra prácticas indebidas cometidas por personal de los Centros de Atención de Desarrollo Rural (Cader) en el interior del estado.
El líder de esta organización, Jaime Soto Escobedo, indicó que se quejan los campesinos de ser extorsionados por los funcionarios con una aportación obligatoria o “moche” por cinco mil pesos para acceder a un tractor subsidiado.
En otro caso, de manera más precisa manifestó que hasta ahora le siguen llegando un sinfín de denuncias de los campesinos del municipio de Cuencamé, donde a muchos todavía no se les paga el Procampo.
“Eso es de dar tristeza y de dar coraje, pues cómo es posible que a estas alturas no se les pague a los campesinos su trabajo, su esfuerzo, que tanta lucha hicieron para sacar sus cosechas y que no se les ha pagado”, dijo.
Manifestó que este retraso ya tiene casi un año mientras los campesinos, o cuando menos los de esa región del estado, siguen en espera de que las autoridades del ramo agropecuario les entreguen sus apoyos de Procampo.
Sin embargo, precisó que la corrupción es un lastre que no solamente afecta el desarrollo de programas como el de Apoyo al Campo (Procampo), sino que en general hay problemas que perjudican a los productores a causa de este fenómeno.
Soto Escobedo ubicó que este problema se ubica en el municipio de Cuencamé, específicamente de la comunidad de Cuauhtémoc.
“Y además, lo que también yo sé es que la gente de los Cader les cobran a los campesinos cinco o seis mil pesos para que salgan sus tractores, para que se les apoye con la compra de sus tractores, y nunca salen, y los vuelven a pedir el año siguiente y tampoco se los vuelven a dar”.
Añadió que “es imposible que cada año los pobres campesinos estén dando mordidas de cinco o seis mil pesos, si ni siquiera se ven beneficiados con la supuesta gestión de los funcionarios de los Cader”.
Finalmente, Jaime Soto agregó que esto ya fue denunciado desde el año pasado, pero ninguna reacción generó la denuncia de la CCI entre las autoridades del ramo agropecuario en Durango.
Apoyos
En doce años de operación el Programa Alianza para el Campo ha ejercido recursos por más de mil 615 millones de pesos en el estado de Durango, aseguró la Sagarpa al hacer entrega de los primeros apoyos del 2007.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), dijo que en ese lapso se ha apoyado la compra de cuatro mil tractores y siete mil sementales de registro.
Y para el presente año, la Delegación informó que los programas convenidos entre el Gobierno del Estado y la Sagarpa generan una expectativa de inversión de 205 millones de pesos.
De esa cifra, el 73 por ciento se encuentra radicado en el Fideicomiso de Distribución de Fondos de la Alianza para el Campo, y se está en condiciones de avanzar rápidamente en el pago de los apoyos autorizados a los productores, añadió.