Recibir muchas donaciones de sangre pone a los pacientes en riesgo
AGENCIA REFORMA
MÉXICO, DF.- Existen personas cuya vida depende de una o varias transfusiones sanguíneas al año, esto significa que pueden requerir entre diez y 20 unidades de sangre en alrededor de 12 meses y, en casos más graves, de una por semana.
?La mayoría son pacientes que desde los seis meses de nacidos requieren transfusiones a causa de anemias congénitas, y no de las que provoca el estar desnutrido?, explica Patricia Oropeza, hematóloga del Hospital General Zona 8, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Por la información genética que predomina en las poblaciones de la costas del país, las anemias congénitas son más comunes en estados como Veracruz, Yucatán, Oaxaca y Michoacán, asegura la experta.
Ser receptores de tanta sangre pone a estos pacientes en riesgo de padecer sobrecarga de hierro que, si no es controlada, puede afectar el funcionamiento de órganos vitales, como el páncreas, el hígado y el corazón y, en consecuencia, provocar diabetes, cirrosis hepática e infartos.
FÁCIL DETECCIÓN
Para saber si estos pacientes tienen cantidades excesivas de hierro, existe una prueba con la que se mide el nivel de ferritina (componente de la sangre).
?Todos tenemos ese componente y lo normal es tenerla en niveles de 150, si tiene más de eso ya padece una sobrecarga de hierro?, señala la hematóloga. La primera recomendación para las familias de pacientes que necesitan transfusiones continuas y por largos periodos es no perder la cuenta de las transfusiones, y en cuanto rebasen las cinco en un año someterse a la prueba de ferritina.
?Se deben determinar periódicamente los niveles de ferritina para que el médico internista o el hematólogo definan cómo disminuir la presencia de hierro en la sangre?, agrega Oropeza.
EL TRATAMIENTO
La sobrecarga de hierro es una condición reversible y controlable. Actualmente existen medicamentos, inyectables y vía oral, que logran atrapar el hierro impidiendo que dañe los órganos vitales.
En cuanto se sabe que existe una sobrecarga, los médicos tratantes deben diseñar el plan de acción para equilibrar la presencia de hierro sin prescindir de las transfusiones, pues éstas son las que mantienen con vida a los pacientes. En algunos casos, desde que se sabe que el paciente va a requerir más de diez transfusiones en un año se le empieza a dar el tratamiento para atrapar el exceso de hierro.
Se estima que más de dos mil mexicanos enfrentan sobrecarga de hierro, especialmente niños, el registro nacional de pacientes con este padecimiento se levantará en 2007.
En la naturaleza
A pesar de que existen alimentos como cereales y galletas fortificadas con hierro, la naturaleza creó muchos con alta cantidad de ese
elemento. Ninguno de éstos puede provocar por sí mismo una
sobrecarga de hierro.
-Ostras.
-Hígado.
-Carne roja y magra (especialmente la carne de res).
-Carne de aves.
-Atún.
-Salmón.
-Frijoles.
-Huevos (especialmente la yema).
-Frutas deshidratadas.
FUENTE: Agencia Reforma
