Las autoridades de la ciudad mexicana de Tijuana, fronteriza con Estados Unidos, se declararon hoy en alerta después de que en California fue emitido un aviso de desalojo voluntario en las comunidades situadas en la línea divisoria por la cercanía de un fuerte "frente" de fuego.
El incendio que podría alcanzar Tijuana está localizado en Otay Mesa, del lado de California, por lo que las autoridades mexicanas de Protección Civil siguen con atención el desarrollo del siniestro.
Marco Antonio Sánchez Navarro, director municipal de Protección Civil, dijo a la prensa que por el momento no se observa peligro para la Mesa de Otay, en el territorio mexicano, pero no pueden desatender el aviso emitido en California.
El funcionario confirmó, además, que por la tarde del martes salieron rumbo a Estados Unidos cuatro unidades de bomberos de Tijuana con por lo menos 34 integrantes para relevar a sus homólogos en California, que no han tenido descanso por los fuertes fuegos desatados hace cuatro días.
De los varios incendios que afectan al estado de California, uno se propagó en días pasados al municipio mexicano de Tecate, cercano a Tijuana, aunque con consecuencias menores y ya fue controlado.
El ministerio de Medio Ambiente ha informado que el total de hectáreas quemadas en territorio mexicano por la propagación del fuego desde California fue de veinte.
Por otra parte, ayer se desató otro incendio en Ensenada, municipio a unos 100 kilómetros de la línea fronteriza, que no fue producto de la propagación de las llamas procedentes de Estados Unidos y que también está bajo control.
Ese fuego fue propiciado por los llamados vientos "Santana", corrientes con las que se prenden rápidamente la hierba seca y la maleza en condiciones mínimas, como un cigarro encendido.