El Ayuntamiento de París inició esta semana un innovador sistema público de alquiler de autos no contaminantes, diseñado para realizar breves trayectos por la capital francesa.
El servicio, bautizado “Okigo”, permite rentar autos durante periodos cortos, de una o dos horas, para poder recorrer la metrópoli a un precio módico.
Una de las grandes ventajas es que los vehículos pueden ser devueltos en cualquiera de los puntos de alquiler de la ciudad para facilitar los desplazamientos, informaron fuentes municipales. El sistema permite reservar autos por teléfono o por Internet tras el pago de un abono mensual de alrededor de 13 dólares.
Cada hora de renta cuesta alrededor de cinco dólares y cuando se superan los límites de kilometraje cada kilómetro extra que se realice costará 50 centavos de dólar.
Los primeros vehículos no contaminantes puestos a disposición de los usuarios tienen menos de seis meses de uso y están fabricados en Francia, específicamente el modelo Peugeot 1007.
“La idea es que sólo estemos obligados a usar nuestro propio coche para lo imprescindible”, afirmó el presidente municipal de París, el socialista Bertrand Delanoe.
Según estadísticas municipales, en París, ciudad caracterizada por graves dificultades de tráfico y de estacionamiento, el 57 por ciento de los hogares no dispone de un vehículo propio, muy costoso de mantener y muy complicado.
Según los datos, un vehículo del sistema “Okigo” puede reemplazar el uso de ocho a 10 vehículos individuales y produce entre un 15 y un 30 por ciento menos de C02.
El sistema inició esta semana con cuatro estaciones ubicadas en igual número de plazas céntricas de la ciudad. El Ayuntamiento prevé que a finales de año estarán disponibles 25 estaciones en total y que los vehículos en renta por este método sean varios miles.