El Siglo de Torreón
MATAMOROS, COAH.- Terrible inicio de año tuvo Rafael Rosas Hernández, luego de descubrir el cuerpo de su hermano con una soga alrededor de su cuello y colgado de una de las vigas de su habitación, ayer por la mañana.
De acuerdo con lo declarado por Rafael, eran aproximadamente las siete de la mañana, cuando al despertar se dirigió al baño. Volteó hacia el cuarto de Porfirio, su hermano de 70 años de edad, sin ver nada extraño.
Minutos después, el hombre decidió entrar a la habitación para ver si todo se encontraba bien, ?pero lo miré colgado con una soga que se encontraba amarrada de una las vigas del cuarto?, dijo.
De inmediato reportó lo sucedido a las autoridades municipales, quienes tiempo después se dieron cita al lugar de los hechos.
Elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal y de la Policía Ministerial, así como José Luis Quiñónez, agente del Ministerio Público, se dieron cita al domicilio marcado con el número 148 de la avenida Rayón esquina con Independencia, hogar que compartían ambos hermanos.
Luego de tomar fe de lo sucedido, el agente investigador ordenó el traslado del cuerpo a las instalaciones del Servicio Médico Forense, para la práctica de la necropsia de Ley.
Rafael comenta que su hermano padecía desde hace varios meses atrás, una enfermedad en la próstata, misma que lo mantenía la mayor parte del tiempo en cama.
?Hace algunos meses, se había notado una mejoría en su salud, pero como hace poco más de dos meses, tuvo una recaída de la cual nunca salió?, comentó Rafael, hermano del hoy occiso.
La enfermedad, según relata, hacía que Porfirio luciera deprimido y sin ganas de vivir, ?pero especialmente, su última noche lucía más deprimido que nunca?, señala Rafael Rosas, quien asegura que la temporada navideña, el estado de salud en el que se encontraba y la fuerte depresión que vivía, probablemente orillaron a Porfirio a quitarse la vida.
