El Consejo Nacional del PAN aprobó por unanimidad su proyecto de presupuesto para 2007, el cual asciende a 742 millones de pesos.
De estos, 142 millones serán canalizados para el pago de un adeudo del partido superior a los 300 millones de pesos, mismos que erogaron para enfrentar las elecciones de 2006.
En la reunión del Consejo Nacional panista -a la que no llegaron más de 200 consejeros-, se estableció el de redistribuir los recursos que reciben cada año los comités estatales.
La propuesta, presentada por su dirigente Manuel Espino fue aceptada, ya que había estados en los que las prerrogativas que entregan los institutos electorales locales son insuficientes a pesar de la representación que tiene el partido en dichas localidades.
Uno de los temas que el Consejo Nacional postergó para su discusión fue el relacionado con las reformas estatutarias que se aprobarán en la Asamblea Nacional del PAN, hasta junio próximo.
El proyecto de reformas fue presentado solamente como un documento para su análisis a los consejeros panistas y será en un Consejo Nacional Extraordinario cuando se modifiquen, en su caso, dichas propuestas.
En este encuentro del Consejo surgió una fuerte discusión por los recursos que se destinarán este año.
Las secretarías de Comunicación y la de Promoción Política de la Mujer se disputaron 2.6 millones de pesos.
Consejeros como Esteban Zamora argumentaron que los recursos debían ir a Comunicación para poder salir a los medios de comunicación, en temas de coyuntura, como por ejemplo el del aborto.
En materia de apoyo a la mujer, voces como las de Rocío Gaytán pelearon más dinero para poder apoyar a ese sector, sobre todo para tener elementos cuando se buscan a candidatas para contender por algún puesto de elección popular.
Al final del debate, se logró destinar 1.3 millones de pesos más del monto original a cada una de las secretarías.
Celebran a Zavala bajo perfil
En su estreno como primera dama ante consejeras nacionales del PAN, Margarita Zavala recibió ayer un reconocimiento por haber “sacrificado” su carrera y mantener un bajo perfil en respaldo al trabajo del presidente Felipe Calderón.
En contraste total con Marta Sahagún, esposa del anterior mandatario federal, Zavala acudió al Consejo Nacional del PAN bajo un marco discreto -por separado de Calderón- para sostener un desayuno con alrededor de 60 consejeras blanquiazules.
En el encuentro, que duró poco menos de una hora, Zavala fue elogiada por la actitud asumida desde la llegada de su esposo a la Presidencia en diciembre pasado, sin concentrar los reflectores en ella ni ejercer activismo político.
“Las consejeras le agradecieron haber mantenido un bajo perfil en los últimos meses y haber apoyado al presidente sin protagonismos”, señaló Gerardo Priego, secretario de Vinculación con la Sociedad del Comité Ejecutivo Nacional panista.
Por la tarde, Patricia Durán, secretaria de Promoción Política de la dirigencia albiazul, detalló que el desayuno fue organizado en buena medida para entregar un reconocimiento a la ex diputada federal por su historial político.
“Todas las consejeras nacionales queríamos hacer un reconocimiento a una mujer que ha trabajado mucho por los panistas, por su trayectoria en el partido, por todo lo que le ha contribuido”, enfatizó.
La de ayer fue la primera sesión del Consejo Nacional panista a la que la primera dama acudió con su marido ya en funciones.
A diferencia de la etapa postelectoral, cuando Zavala atendió la sesión del Consejo acompañada de su encargada de prensa y varios asistentes, ayer arribó a la sede panista sola, acompañada únicamente por elementos del Estado Mayor Presidencial.