EDITORIAL Caricatura editorial columnas editorial

¿Arreglo previo?| Jaque Mate

Sergio Sarmiento

“Prefiero perder con honor que ganar con trampas”.

Sófocles

¿Hubo un arreglo previo en la licitación por Aeroméxico? ¿Se hicieron las cosas para garantizar el triunfo del grupo de inversionistas apoyado por Banamex? Así lo piensa cuando menos Moisés Saba, el licitante perdedor, quien ayer en mi noticiario de la Red de Radio Red debatió públicamente con Teresa Fernández del IPAB.

No se trata de una simple teoría de “compló”. Los argumentos parecen sólidos. En el mejor de los casos parece que el IPAB aplicó reglas distintas a Saba y al grupo de Banamex.

La puja por Aeroméxico empezó el 22 de agosto cuando Moisés y su padre, Alberto Saba, ofrecieron 1.10 pesos por acción en una oferta valuada en 99 millones de dólares. El 13 de septiembre un grupo de 14 inversionistas encabezado por José Luis Barraza y apoyado por Banamex –que se quedaría con una participación minoritaria para no violar las limitaciones a la inversión extranjera en aerolíneas— ofreció 1.6842 pesos por acción para un total de 151 millones de dólares.

Desde entonces empezó una puja de tres bandas en la que participó Gastón Azcárraga de Mexicana antes y después de ser descalificado por la Comisión de Competencia. El 16 y 17 de octubre la puja se convirtió en un verdadero juego de nervios.

Banamex había cotizado 1.79 más una opción o warrant cuyo valor, según el propio IPAB, no podía valuarse adecuadamente. De acuerdo con la versión de Saba, el 16 de octubre él ofreció 1.8099 pesos por acción. En una comunicación que se le hizo llegar a las 11 y cuarto de la mañana, el IPAB le informó que, si al mediodía de ese mismo 16 su oferta era todavía la más alta, la aerolínea era suya.

A las 11:33 de la mañana, según la hora del envío de la oferta desde la computadora, Banamex propuso 1.8686 pesos. A las 11:59 con 27 segundos, Saba mandó una nueva oferta por 1.90. Banamex reviró con 2.25, lo cual implicaba una propuesta de 35 millones de dólares más que su anterior postura, pero la oferta llegó a las 12:00 con 53 segundos.

Si no se consideraba válida la oferta, por haber llegado 53 segundos después del límite, Saba era el ganador. En caso de ser válida, por elevar la puja en más de 5 por ciento, debía considerarse un “evento relevante” y según el Artículo 97 fracción III de la Ley del Mercado de Valores, debía ampliarse el plazo del proceso cinco días más.

En lugar de cumplir con el plazo original de las 12 del día del 16, o de considerar válida la oferta extemporánea de Banamex y abrir un compás de cinco días para nuevas ofertas, el IPAB cambió las reglas del juego. Puso un nuevo plazo, pero sólo hasta las cuatro de la tarde del día siguiente, el 17. Determinó también que la hora de envío desde la computadora no sería ya el tiempo oficial de la oferta sino el momento en que ésta se registrara en el sistema electrónico conocido como Emisnet. Esto le quitaba a los ofertantes el control del momento de la oferta y se lo daba a quien controlara la computadora de recepción.

Saba licitó 2.33 pesos por acción en la noche del 16. Mexicana, ya descalificada por la Cofeco, presentó una oferta entre 2:30 y 2:45 del 17. La puja se volvió después un juego de nervios. Saba hizo una oferta a las 3:45 y otra a las 3:57, la cual fue registrada en el Emisnet a las 3:59,38. Cinco segundos antes, a las 3:59,33, había entrado una ligeramente superior, por 2.7159 pesos de Banamex. Saba contestó con una propuesta superior, segundos antes de las cuatro, pero el Emisnet sólo la registró a las 4:02.

¿Fue limpio el juego o estaba arreglado? Este 18 de octubre la columna Templo Mayor del periódico Reforma publicó que varias personas que asistían a una cena homenaje de la Fundación UNAM al rector Juan Ramón de la Fuente en la Casa del Lago vieron a Guillermo Ortiz, gobernador del Banco de México, levantarse, hablar por teléfono y decir: “No, no me digas que Saba hizo la propuesta más alta […]. Banamex presenta la propuesta al cuarto para las cuatro”.

El 16, según las reglas originales, Saba debió haber ganado a las 12 del día en punto. Pero no sólo no se le dio el triunfo, sino que se amplió el plazo, no por los cinco días previstos por la Ley en caso de un evento relevante como sería una oferta superior en 5 por ciento a la previa, sino sólo al día siguiente. La decisión de que fuera la hora del Emisnet y no la de envío de la oferta la que fuera válida, por otra parte, pareció sellar todo el esquema.

¿Aplicación de reglas claras o complot? Es difícil saberlo, pero ahí están los hechos. Lo que es una lástima es que un proceso de venta tan importante haya quedado nuevamente oscurecido por cambios de reglas de último momento que parecen hechos para favorecer a un contendiente.

NAPOLEÓN

Un triunfo enorme consiguió Napoleón Gómez Urrutia en el juzgado octavo de distrito del Distrito Federal al obtener un amparo definitivo contra tres órdenes de aprehensión en su contra. El amparo rechazó que los estados de San Luis Potosí y Sonora puedan girar órdenes de aprehensión en contra de Gómez Urrutia por un presunto delito cometido en el Distrito Federal. Más de fondo, sin embargo, fue la decisión del juez que determina, como me dice el abogado Juan Rivero del Sindicato Minero, que los 55 millones de dólares del disputado fideicomiso de Scotiabank eran del sindicato y no de los mineros.

Página de Internet: www.sergiosarmiento.com

Leer más de EDITORIAL / Siglo plus

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 305252

elsiglo.mx